El entrenador del Burela FS se harta de los árbitros: «Que la gente juzgue si este esperpento vale 20.000 euros»
DEPORTES
David Rial cuestionó su nivel tras la derrota por 3-4 frente a un Zambú Pinatar que igualó el partido en un doble penalti propiciado por dos amarillas al banquillo
09 nov 2025 . Actualizado a las 14:10 h.Más allá de una primera derrota como local que aleja más al Burela FS de la zona noble de la Segunda División de fútbol sala, la visita del Zambú Pinatar al Vista Alegre provocó un monumental cabreo del entrenador del cuadro naranja, David Rial, con la actuación arbitral. Aunque el santiagués descargó a los navarros Kepa Díez y Mauricio Bravo de responsabilidades en el resultado final, sí puso en entredicho la capacidad del colectivo con un contundente mensaje: «Que la gente juzgue si este esperpento vale 20.000 euros».
Fiel a su habitual discurso pasional, el técnico lamentó que dos tarjetas al banquillo —una a él y la otra al médico Javier Couce— completasen el cupo de faltas mariñanas y propiciasen el doble penalti con el que José Saura estableció el 2-2 en el minuto 19. «No están capacitados para pitar un cinco contra cinco y les damos poder para echar amarillas al banquillo para pitar dobles penaltis. ¿Por qué no echan amarillas cuando un jugador se tira y sí al banquillo? Porque el de fuera no le condiciona el partido si lo echa y al del campo y al del campo tengo que tener cuidado luego si le echo la segunda. No pueden tener ese poder porque no tienen el nivel», reflexionó.
«Este servicio cuesta 20.000 euros al año. Aproximadamente, no soy el gerente del club. Que la gente juzgue si este esperpento vale 20.000 euros al año para un club. Ha habido dos saques de puerta para ellos que pita córner que ya miré a Dani (Martínez, el entrenador del Zambú Pinatar) y nos reímos el uno con el otro. Es terrible», continuó un encendido David Rial.
El estratega del Burela, además, dijo sentirse señalado por su habitual vehemencia en el banquillo: «Ya vienen con las órdenes de su jefe Álvaro (Cid Bragado, el presidente del Comité Nacional de Árbitros): "Cuidado con David". Y el informador lo mismo. Y claro, como soy un tío pasional, piso la línea y venga, amarilla. Pues nada, queremos un deporte donde todo el mundo esté sentado y que Teledeporte se aburra de nosotros y eche cualquier otra cosa».
Rial también denunció la diferencia de trato con su homólogo al frente de los murcianos: «Dani entró siete metros en la pista y yo pisé la línea. Que miren en el acta quién tiene amarilla. Y no me meto con Dani, que es un tío de puta madre y un pedazo de entrenador. A David es porque les mandan, que no somos tontos y ya lleva cinco partidos pasando. No pasa nada, me jubilaré y me iré a pescar, porque si no me dejan ser como soy, si no me dejan ser pasional, que creo que también es lo bonito de este deporte, que la gente lo viva y que la gente sea pasional, me iré a pescar y que la gente dirija sentada y que se coma la mierda de deporte que quieren crear».
«Perdemos por regalos»
«No perdemos por los árbitros», matizó un entrenador que ya había comenzado la rueda de prensa en el Vista Alegre expresándose «enfadado» por la forma en la que sus hombres concedieron la derrota. «Si a estos niveles regalas, te vas con cara de tonto. En el minuto cinco regalamos el primer gol, que nos juegan una puerta atrás y nos la ganan. Ahora me dirán que es que sois pocos y estáis cansados, pero en el minuto cinco ni somos pocos ni estamos cansados, porque estamos frescos. Y después, cuando hacemos el partido parejo, nos meten el tercero en otro regalo. A estos niveles, si regalas y tú llegas y no las metes, es un problema. No me preocupa en líneas generales porque creo que el equipo es un buen equipo y compite dentro de las circunstancias, pero a nivel individual hay que exigirse porque aquí hay mucho nivel y hemos jugado contra un equipazo, el mejor que ha pasado por Vista Alegre», dijo.
David Rial, no obstante, se puso el primero en la lista de deberes. «Si las cosas no funcionan, el principal culpable soy yo porque tendría que buscar cosas para cambiarlo y que los errores que nos penalizan dejen de penalizarnos. Estoy convencido de que tenemos las capacidades de sobra para ganar partidos, los ganaremos y, evidentemente, también hay que tener en cuenta que hemos tenido un inicio de calendario difícil», destacó sobre un Burela que, tras siete jornadas se sitúa noveno con ocho puntos en la Segunda División de fútbol sala.