Carlos Alcaraz se toma un respiro con Australia en el punto de mira

Enric Gardiner COLPISA

DEPORTES

ALESSANDRO DI MARCO

El murciano descansará unos días antes de comenzar a preparar la temporada del 2026

19 nov 2025 . Actualizado a las 15:07 h.

Descartado ya de la Copa Davis, Carlos Alcaraz descansará los próximos días hasta recuperarse del edema que sufre en el isquiotibial de la pierna derecha y comenzará después una pretemporada en la que el objetivo está marcado: llegar en las mejores condiciones posibles a Australia.

El torneo oceánico, que comenzará el 12 de enero, es el único grand slam que falta en las vitrinas del murciano y este año tendrá la oportunidad de convertirse en el más joven en la historia en conquistar los cuatro grandes, superando el registro de Rafael Nadal.

De momento, el joven solo tiene una parada programada en su calendario, una exhibición en Miami el 8 de diciembre, en la que se juntará a Emma Raducanu, Amanda Anisimova y Joao Fonseca. Seguramente no sea el último partido amistoso que dispute como preparación para el viaje a Melbourne, ya que no suele jugar torneos previos, sino que confía más en estas exhibiciones para ponerse a tono de cara al grand slam.

Además, horas después de confirmarse su ausencia en la Copa Davis, se anunció su participación el año que viene en la Laver Cup de Roger Federer, donde participará por tercer año consecutivo. Este evento será en Londres en septiembre.

El riesgo que corría Alcaraz de haber jugado en Bolonia era de agravar su lesión y poner en peligro la participación en Australia, por lo que la recomendación médica, tanto del suyo personal como del de la Federación Española, era que renunciara al torneo y se centrará en recuperarse. A sus 22 años, el de El Palmar tendrá muchas otras oportunidades en el futuro para agregar la ensaladera a su palmarés. Por el momento, el objetivo pasa a ser el Abierto de Australia.

A por la Copa Davis sin el número 1

La ausencia de Carlos Alcaraz ha dejado a España tocada, pero no hundida. La clase media del tenis nacional, representada en Jaume Munar, Pablo Carreño, Pedro Martínez y Marcel Granollers, tiene la heroica tarea de pelear por un derecho que ellos mismos se han ganado: la séptima ensaladera.

«Es una pena para el equipo porque, claro, nos resentimos de no tener al número uno del mundo, pero si estamos en estas finales es gracias a todos ellos, y eso sí que lo quiero resaltar», subrayó el capitán, David Ferrer.

Porque si están en Bolonia para jugar estas finales de la Copa Davis es porque Munar, Carreño y Martínez, además del ausente Roberto Carballés, vencieron a Suiza en febrero y a Dinamarca en septiembre. Sin Alcaraz, que se perdió ambas eliminatorias por desgaste, ni Alejandro Davidovich, también tocado, ni Granollers, que estuvo lesionado en ambas fechas, España logró lo que parecía imposible y es casi justicia divina que los héroes de ambas eliminatorias sean los que tengan el honor de defender los colores de la selección.

«Más que pensar en lo que no tenemos, debemos aferrarnos a lo que sí tenemos, que es fantástico», aseveró Munar, que será la primera opción de Ferrer dados sus grandes actuaciones en pista dura esta temporada. El balear alcanzó el mes pasado las semifinales de Basilea, hizo octavos de final en Shanghái (donde le ganó un set a Novak Djokovic) y en el US Open, además de llegar a las semifinales de Dallas a principio de temporada.

«Nos hubiera gustado que estuviera Carlos y, obviamente, nuestro equipo puede parecer más débil sin él, pero la realidad es que confío muchísimo en todos ellos. Yo confío plenamente en mis posibilidades y en las de todos mis compañeros. Creo que eso tiene que predominar por encima de cualquier otra cosa».

Enfrente este jueves estará una República Checa que se mueve como pez en el agua en la pista de cemento bajo techo de Bolonia. Los hombres del mítico Tomas Berdych son Jiri Lehecka (17), Jakub Mensik (19) y Tomas Machac (32), con la posibilidad de añadir a Adam Pavlasek al dobles. Estos tres tenistas son grandes sacadores y serán a priori favoritos contra los españoles, pero esto es la Copa Davis y cualquier cosa puede pasar.

El ganador de la eliminatoria se medirá a Argentina o Alemania en semifinales, en tanto que la primera selección entre las cuatro mejores es Bélgica, que sorprendió a Francia con las victorias de Raphael Collignon ante Corentin Moutet y de Zizou Bergs frente a Arthur Rinderknech.