Valeria Batire y Azkar, de Oroso al subcampeonato del mundo de canicrós

DEPORTES

SANDRA ALONSO

La joven atleta supo desde el minuto uno que acababa de descubrir el deporte que le permitía unir sus dos pasiones, «correr y los perros»

03 dic 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Valeria Batire Guridi Diéguez, a sus 20 años, lleva seis haciendo carrera en el universo del canicrós, en progresión geométrica. Desde niña practica el atletismo. Y descubrir esta modalidad, en la que el deportista corre unido a un perro por un arnés y un tiro elástico, fue un flechazo: «En el 2019 tuve la oportunidad de probar en el club de Alejandro Gómez, y desde el primer momento supe que este era mi mundo porque unía mis dos pasiones, correr y los perros. Más que un deporte, es una forma de vida. Es la unión del deporte con la naturaleza, y la complicidad con tus perros. Es sensacional».

No solo fue amor a primera vista. Los resultados llegaron de inmediato: «Recuerdo mi primera carrera de canicrós, en Boborás, en diciembre del 2019. Yo iba a probar y, sin esperarlo, gané mi primer campeonato de España en categoría júnior con Tormenta, una perra de Alejandro Gómez. Fue algo increíble».

Desde entonces no ha parado de engrosar su palmarés. Es la vigente Campeona de España sénior, título que aspira a revalidar este fin de semana en Soria. Y viene de proclamarse subcampeona del mundo en la República Checa, con Azkar, al que adora: «Es un greyster de 3 años, un perro muy fuerte y rápido, pero lo que más destaca es su cabeza, su instinto de líder y lo bonachón que es con las personas y con el resto de los canes».

El entendimiento y la sincronización entre ambos se genera de manera natural, tal y como explica Valeria Batire: «Somos un binomio perfecto. Mi perro disfruta corriendo y yo entreno cada día para intentar estar a su nivel». No obstante, hay una parte de adiestramiento, a fin de que el can sepa interpretar las órdenes para girar a la derecha o a la izquierda, parar, arrancar y la cuenta atrás en la salida.

Estudios y entrenamientos

La joven atleta se desplaza a diario desde Oroso hasta A Coruña a primera hora de la mañana para cursar estudios de Acondicionamiento Físico, un grado superior de FP. Regresa a media tarde. Y a partir de ahí trata de encajar los entrenamientos, durante la semana. Sábados y domingos dispone de más margen horario.

En todos los caso hay que evitar el asfalto, que no es apropiado para los perros, de modo que debe buscar zonas de tierra. Y la temporada se inscribe en el invierno, ya que los animales no pueden competir ni entrenar con temperaturas altas.

Valeria Batire es la vigente campeona de España absoluta y se alzó con ese mismo título en tres ocasiones en categoría júnior. Llegó a Chequia con aspiraciones, pero también con dudas, y todo le salió muy redondo: «Me encontraba en buena forma física y había entrenado para ello, pero en el verano un accidente deportivo me hizo tener que parar varios meses, por lo que llegaba justa para el Mundial. Competía contra las mejores. El subcampeonato fue algo muy especial».

Tiene claras las claves para poder codearse al más alto nivel en el canicrós: «El secreto está en amar lo que haces y tener disciplina, constancia, capacidad de sacrificio. Renuncias a muchas cosas para poder rendir al máximo en el deporte y además hay que compatibilizar con los estudios. Levantarse muy temprano para buscar temperaturas bajas, entrenar bajo la lluvia en terrenos llenos de barro, difíciles para correr... Pero así es el mushing, en cualquiera de sus modalidades».

En Soria parte como favorita, pero prefiere evitar las etiquetas y enfocar la prueba como siempre hace, tratando de superarse en tándem con Azkar.

Madre, hija, autocaravana, tres perros y muchos kilómetros

Valeria Batire es la atleta, pero en todo momento habla de un contexto de equipo y familia en el que incluye a sus perros y no olvida la implicación de su madre Julia, en el día a día y a la hora de afrontar las competiciones.

Además de Azkar, están «Dancha, una alaskana de 5 años, y Lume, mi cachorro eurohound, el terremoto de la casa y que pronto empezará a competir». El cuartel general está en Oroso, y los desplazamientos siempre los hacen en autocaravana.

Valeria todavía no tiene el carné de conducir y es la madre la que se ocupa del volante y de todos los kilómetros por carretera. Eventualmente, la opción del avión, más costosa, añade el inconveniente de ser más estresante para os animales. Además, no suele ser sencillo encontrar hoteles que admitan tres perros de cierto tamaño. Y, con frecuencia, los escenarios de la competición están alejados de los grandes núcleos urbanos.

Esta semana toca desplazamiento a Soria. Llevadero. A principios de mes, en cambio, fue la República Checa. Alrededor de 2.500 kilómetros ida y otros tantos de vuelta. El año pasado el Campeonato de Europa se disputó en Finlandia: 4.500 para llegar y 4.500 de regreso. En este lustro también se suman viajes a Alemania, Francia y Portugal, además de las competiciones en España. Hay que cuadrar presupuestos y calendarios laborales y de estudios. No es fácil.

No hace falta hacer muchos números para calibrar gastos, por mucho que se aquilaten. Y tampoco cabe perder de vista la alimentación y los controles veterinarios de los canes: «Requieren un buen pienso especial para perros con actividad intensa deportiva, suplementos nutricionales naturales, condroprotectores para proteger sus articulaciones y una buena hidratación antes y después de cada entreno o carrera. Están controlados por sus veterinarios, que además de vacunarlos, realizan chequeos de salud antes de empezar cada temporada y cuando lo necesitan». «Tengo algunas subvenciones por ser deportista de alto nivel y por ser parte de la selección nacional de mushing, pero no alcanzan para costear los gastos elevados que conlleva este deporte sobre todo a nivel internacional», resume Valeria Batire, sin olvidar el apoyo de patrocinadores privados, como «Clínica veterinaria MiVet, Agrobotica Santiago y los Laboratorios Stangest y Vetplus», en el cuidado de los perros.