
Consideran, en un escrito remitido a la federación, inviable el protocolo del covid
21 sep 2020 . Actualizado a las 20:59 h.El fútbol modesto gallego prefiere hibernar las competiciones de liga al considerar inviable jugar con las actuales condiciones sanitarias y cumpliendo el protocolo fijado por el coronavirus. Más del 62 % de los clubes pertenecientes a la subdelegación de Santiago, entre ellos siete de Deza y Tabeirós, remitieron un escrito a la Real Federación Galega de Fútbol rechazando el comienzo de la Primera, Segunda y Tercera Autonómica. Una postura firme «ata que as condicións sanitarias sexan as óptimas, os noso xogadores e directivos non corran riscos de contaxio, e os clubs non se vexan prexudicados polas aplicacións dos protocolos». Entre los firmantes del escrito figuran la SD Bandeira, Berres, Rodeiro, Guimarei, Laro, Vea y Vilatuxe.
Otros clubes de la zona, entre el 25,5 % pendiente, postergaron pronunciarse sobre su adhesión a esta propuesta en espera de una reunión previa de la directiva o de los socios o de valorar más en profundidad su contenido. En esa situación estaban ayer el Agolada, Cruces, Cruces B, Lalín, Silleda y Silleda B. Mientras, solo hay un 12 % de clubes, como el Estradense B y el Lamela, que rechazaron esa postura de atrasar la competición.
En el escrito a la federación se insiste en que «non nos negamos a que haxa tempada, posto que o que todos queremos é xogar, pero non nestas condicións. No caso de que as condicións cambien en xaneiro, febreiro, marzo ou cando sexa estariamos dispostos a valorar comezar a competición, pero os clubs somos conscientes que comezar neste momento pode traer máis prexuízos que beneficios para toda a sociedade e para a evolución da pandemia». Entre otros argumentos para rechazar iniciar las ligas el día 1 de noviembre o permitir entrenamientos con contacto desde octubre se encuentra la actual situación de crisis sanitaria derivada del coronavirus, «sen saber como se vai comportar na época de frío, coincidindo con outras enfermidades como a gripe» y cuestionando que ahora se permita deporte de contacto cuando no ocurría en junio, «cando apenas había contaxios».
Apelan además a que en el fútbol aficionado no se depende económicamente de su práctica, «na maior parte dos casos supón máis gastos e sacrificios que ingresos ou beneficios», por lo que consideran un sinsentido comenzar unas ligas que «non achegan economicamente nada». Creen inasumible por directivos, técnicos y jugadores asumir el riesgo de contagiar a terceras personas con las que conviven, en muchos casos de alto riesgo.
Respecto al protocolo para jugar, aluden a los requisitos para el uso de los vestuarios, que son en la práctica imposibles de cumplir por las distancias de seguridad entre jugadores. Discrepan con la federación en que si no hay liga regional esta temporada los clubes desaparecerán, sino todo lo contrario, porque apenas tendrían costes que sí serían subir respecto a los habituales por culpa del coronavirus mientras se reducirían los ingresos. «Non ten sentido o fútbol rexional a porta pechada ou con limitación de público», esgrimen también.
El coste de los test serológicos y cada vez que se repitan las pruebas, así como el equipo de control de temperatura, resultarían imposibles de asumir por los clubes, para discrepar con el uso de máscaras para jugar o con que se dé por perdido un partido al «causante» por tener casos positivos o instalaciones cerradas.