Los rojinegros buscarán la sorpresa y postergar otra semana el descenso
15 may 2021 . Actualizado a las 05:00 h.El Balonmán Lalín viaja a tierras castellanas con la misión de mantener vivas una semana más las opciones de salvación. Los rojinegros se enfrentan hoy (19.00 horas, pabellón polideportivo Ángel Nieto) al BM Zamora, en la actualidad tercero en la tabla clasificatoria y con la permanencia en el bolsillo. Quizás ese hecho abre un atisbo de esperanza para los dezanos, que necesitan ganar y esperar al resto de resultados para saber si todavía pueden pensar en ese improbable milagro que les mantenga en Plata. O al menos lograr estirar una jornada más y solo con dos por disputarse esa posibilidad.
El bajón anímico del pasado sábado, tras caer en el Arena ante el Ikasa Madrid, sabedores de que agotaban el margen para continuar en la División de Honor B se fue mitigando con el paso de los días. Como apuntaba ayer el entrenador, la herida va cicatrizando y se relativiza lo ocurrido. Porque ahora lo que toca es seguir disfrutando de la categoría, como ocurrió el resto de la temporada, en estos tres últimos partidos de la fase decisiva.
Pablo Cacheda se aferraba a que todavía no está todo perdido, aunque sabe que será «moi moi moi difícil» seguir en Plata, requiriéndose muchas carambolas y un pleno de tres victorias seguidas. «Vamos a loitar como cada partido por gañar, pero xa foi un hito estar aí despois de moitos anos en que non se vivía isto e toda desfrutar ata o final», sentenciaba. Cuenta con toda la plantilla disponible, aunque varios jugadores están tocados o con molestias, dificultando unos entrenamientos con la intensidad que le gustaría a Cacheda. Tras la sesión de anoche y en función de las últimas sensaciones iba a realizar la convocatoria, así como los descartes para viajar a Zamora.
El técnico rojinegro resaltaba que no están en la mejor situación ni anímica ni físicamente y enfrente tendrán a un rival de primer nivel, que perdía la pasada semana ante el Unión Esportiva Sarriá después de encadenar varias victorias seguidas. Cacheda confía en mostrar el nivel de la ida en el Arena, donde estuvieron por delante durante buena parte del choque, aunque en el último minuto y medio los zamoranos lograron hacerse con el triunfo.
Los dezanos buscarán competir a ese mismo nivel, sabedores de que pueden hacerlo ante el Zamora. Un conjunto del que Cacheda destaca al portero, Tomás Mendieta, así como a los veteranos Jortos y Guillermo, con trayectoria en la Asobal y que toman las riendas del juego con la máxima responsabilidad para desatascar los partidos. Las posibilidades para el BM Lalín pasan por un marcador bajo -en la ida se acabó con un 23-25-, con una defensa muy férrea y acierto bajo palos, además de minimizar las pérdidas de balón y estar menos erráticos que en encuentros anteriores ante la portería contraria. Los locales basan su efectividad en una férrea defensa, resultando muy difícil hacerles gol. Los contragolpes pueden ser el arma para contrarrestarles.