
La venta de centros de flor artificial de calidad va ganando adeptos
30 oct 2021 . Actualizado a las 05:00 h.En la floristería de Esther Portela, en Lalín, un cartel advierte estos días a los vecinos que desde el 28 no se cogen más encargos. La duela del establecimiento explica que este año mientras que otras veces el trabajo se concentra en los últimos tres días previos a la celebración de Fieles Difuntos y Todos los Santos, está vez empezaron mucho antes y será una semana larga de mucho trabajo.
Explica que «pechei xa os encargos porque non dou xa atendido máis volume» señalando que «a xente empezou xa o luns e as vendas van mellor que outros anos». Un aumento que, en su caso, se refleja en mas ventas y un mayor gasto por parte de la clientela respecto a años anteriores pese a la subida del precio de la flor y el transporte que hacen que el producto se haya visto encarecido, en algunos casos, en cerca de un 20 %.
En cuanto a la procedencia de las flores, en varios establecimientos lalinenses indican que los crisantemos que compran proceden de viveros gallegos. Mari Luz González Calvo, de la floristería González, señala que «procuramos mercar todo o que podemos en Galicia para axudar». Hay flores que no es posible como en el caso de alguna variedad más exótica. Otras como las rosas vienen habitualmente en esta época de países como Colombia.
Este año la venta de centros de flores triunfa más que nunca, aunque la venta de plantas también se mantiene. En crisantemos se puede encontrar una amplia variedad y los precios, en flor cortada, dependen mucho del tamaño y forma. Esther Portela cifra en 1,60 el tallo de los de margarita, mientras el de un crisantemo de bola puede llegar a los 2,80 euros y un boris a 1,80. El precio de las plantas también se incrementó respecto a años anteriores pero en el mercado se pueden encontrar desde 5 euros.
Los gustos de los vecinos a la hora de adquirir encargos se mantienen en general. Charo Senra, de la floristería lalinense que lleva su nombre, apunta que «o branco sigue sendo un dos que máis se demanda». El culto a los muertos se mantiene y, señala, «as familias lle levan algo a todos os seus defuntos e reparte flores ou plantas por todos os nichos dos seus familiares, hai que leva 10 ou 12 plantas».
Los precios de los centros oscilan en cada establecimiento y Charo cifra en 50 euros el mínimo del gasto por cada cliente. Hay también que a la hora de realizar sus encargos busca composiciones diferentes.
Todas las floristerías tienen en estas fechas encargos especiales, desde composiciones en forma de corazón o cruz, que son ya casi un clásico hasta otros que pretenden diferenciarse. Luz González señala que «temos varias encargas especiais cada año, este por exemplo unha estrutura e unha coroa con musgo e flores». Unos trabajos agradecidos que permiten a las profesionales del sector demostrar su creatividad.
Blanco y colores cálidos
Fuera del blanco, las floristas coinciden en que el rojo y, en general, los colores cálidos gustan. Alguna destaca que pese a ser unos arreglos de difuntos para los cementerios, los vecinos demandan composiciones alegres. De ahí que colores como el amarillo y el naranja estén muy presentes junto también con los tonos malvas y morados más propios de esta fecha.
Junto a todo tipo de crisantemos, los centros incluyen desde flores del ave del paraíso, a girasoles, pasando por todo tipo de flores. Esther Portela destaca que «todo o mundo pide que o centro leve algunha rosa». Este año, en las composiciones, está de moda la paniculata de colores.
Este año, otra de las novedades son los centros de flor artificial pero en las floristas lalinenses coinciden que los que se demandan son únicamente de mucha calidad con cuidadas composiciones que imitan a la perfección la flor natural. Charo Senra explica que este tipo de demanda, en su caso, procede, sobre todo, de gente que reside fuera de la zona y que no puede con frecuencia al cementerio a reponer las flores.
En otros casos, son simplemente clientes que se decantan por este tipo de arreglos más duraderos. Es un tipo de producto cuya venta está creciendo de forma exponencial.