La facturación de las principales firmas cayó un 7 % en el 2020

David Cofán Mazás
David cofán A ESTRADA, LALÍN / LA VOZ

DEZA

E CUIÑA

La pandemia provocó que descendieran sus ganancias hasta los 411 millones de euros con respecto a los 444 obtenido el año previo al covid

26 jun 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Como era de esperar, el impacto de la pandemia en el tejido productivo de Galicia, y concretamente en las comarcas de Deza y Tabeirós-Terra de Montes, ha sido notorio. Las sensaciones y los testimonios de empresarios y trabajadores a raíz del estallido del covid-19 en el 2020 se reflejan con nitidez y de forma detallada gracias a la actualización de la base de datos Ardán, que elabora el Consorcio Zona Franca de Vigo. Un listado que incluye los balances de las 21.000 principales firmas de la comunidad en el último ejercicio cerrado en el Registro Mercantil, que en este caso se corresponde al año 2020.

Después de varios años de tendencia alcista, la pandemia desplomó la facturación de las diez principales compañías de la zona, así como las ganancias totales de las 567 firmas existentes en el 2020. En el caso de las principales empresas la facturación bajó un 7 %, pasando de los 444 millones del 2019 a 411.743.748 euros al año siguiente. Un descenso que afectó seis de las diez firmas líderes de Deza y Tabeirós, alguno especialmente brusco como la constructora lalinense Ramos y Taboada, que cayó del top 10, o como Martínez Otero Contract, que en un año su facturación pasó de casi 58 millones a 37.

Inasus, la que más creció

La empresa estradense pasó del segundo puesto al quinto, ocupando su lugar Frigoríficos Bandeira, pese a perder más de ocho millones de euros en ganancias comparado con el 2019, pasando de 57.372.533 a 49.204.199. Menos se resintió Nudesa, liderando un año más la tabla con más de 120 millones de euros. Eso sí, facturó más de un millón por debajo del año anterior. En tercera posición está Conejos Gallegos, de Rodeiro, que obtuvo 44 millones en ganancias, uno más que en el 2019.

En cuanto a las que capearon la pandemia con mejores resultados, Inasus es la referencia. La firma afincada en Lalín ocupa la cuarta posición después de facturar casi 15 millones más en un año (40.331.318). De hecho, estos datos permitieron saltar tres puestos después de ser la octava compañía de la zona en el 2019. También aumentaron su facturación pese al bum de la pandemia Industrias Frigoríficas del Deza y Nucamsa. La compañía de Dozón lo hizo en dos millones, mientras que la lalinense en algo más de uno.

A Estrada y Lalín

Ninguna firma estradense ni lalinense está en el top 3. Los principales polos económicos de la zona incluyen en el listado a tres empresas cada uno, Lalín perdiendo una y A Estrada incluyendo a Hierros Diego en la décima posición.

Lalín y A Estrada aportan el 60 % de las empresas incluidas en el listado

En 2020 se incluyeron 18 compañías más en la lista Ardán que en el 2019, cuando eran 549. Un aumento que no se tradujo en mayor facturación global para las empresas de Deza y Tabeirós-Terra de Montes. En el ejercicio anterior se situaron por encima de los 1.200 millones de euros, mientras que el último dato se queda en los 1.171. Pese a todo, se encuentra por encima de la facturación total del 2018 (1.100).

En cuanto a los municipios con mayor cantidad de firmas incluidas en el listado, el que más tiene es Lalín con 208, seguido de A Estrada con 138. Esto significa que más del 60 % de las empresas presentes en la base de datos de Ardán son de estos dos concellos. En tercer lugar está Silleda, que aporta 113 y entre ellas las dos que más facturaron. Después está Vila de Cruces con 36, Rodeiro con 18 —una en el top 3—, Forcarei con 13, Dozón con 8 —una en el top 10— y cierra la tabla Cerdedo con 7.

Taboada y Ramos facturó un 93 % menos

La ralentización de la actividad económica en el 2020 golpeó con dureza al sector de la construcción. Con respecto al 2019, la constructora lalinense Taboada y Ramos facturó un 93 % menos. Cifras que la desbancan del top 10, cayendo desde los 34.189.865 hasta los 2.251.517 euros. Además, el impacto se aprecia con claridad también en otros ámbitos como los empleos, con una considerable caída, pasando de 169 trabajadores a 9 en un año.