El servicio para Deza se habilitará en un edificio de Lalín
25 jun 2024 . Actualizado a las 22:31 h.La conselleira de Política Social, Fabiola García, se comprometía con el regidor de Lalín, José Crespo, a licitar este mes las obras para habilitar el Punto de Encontro Familiar (PEF) que dé servicio a toda la comarca dezana. Así se lo trasladó el pasado 8 de junio en una reunión de trabajo celebrada en la capital compostelana, donde se avanzó que el coste para acondicionar la futura sede del PEF supondría un desembolso por parte de la Xunta de unos 125.000 euros. Esa promesa se está cumpliendo ya que Política Social confirmaba ayer que están en licitación los trabajos.
El Punto de Encontro Familiar do Deza se emplazará en dos viviendas situadas en la planta baja del número 5 de la calle Manuel Rivero. De propiedad municipal, su interior se acondicionará para habilitar salas, espacios y despachos requeridos para la prestación de este servicio. El presupuesto máximo de adjudicación entre las ofertas que opten al contrato se fijó en 125.501 euros, financiándose el proyecto con fondos europeos del plan Next Generation. El plazo de ejecución de los trabajos se estableció en tres meses desde la firma del contrato con la empresa que se haga con la adjudicación.
El de Lalín será el noveno PEF que funcione en Galicia, sumándose a los existentes en las siete ciudades y en la comarca de Barbanza. Evitará a los usuarios de este tipo de servicios de la comarca dezana desplazamientos de bastantes kilómetros.
Benestar de los menores
Los centros de estas características buscan preservar la relación entre los menores y las personas de sus familias en situación de crisis. En todo momento se procura la seguridad y el bienestar de los niños, favoreciendo los vínculos con sus familias, a las que además se facilita el cumplimiento de los regímenes de visitas. Este equipamiento social está especializado en esta cuestión tras ser establecido por la autoridad competente, en casos como separación, divorcio, nulidad, tutela o cualquier otro supuesto de interrupción de la convivencia familiar. También cuando el ejercicio del derecho de visitas se vea interrumpido o su cumplimiento resulte difícil o conflictivo.
En los PEF como el que funcionará en Lalín hay entrega y recogida de los menores con intervención de profesionales en esos momentos, actuándose como intermediarios o supervisores. En sus instalaciones hay visitas tanto tuteladas, con supervisión y por un tiempo máximo de dos horas, como supervisadas, en este caso sin la presencia continuada del equipo técnico. Además se diseñan y desarrollan programas psicoeducativos individualizados de intervención con las familias y los menores, con el fin de lograr la normalización de las relaciones. Y se ofrece orientación y apoyo familiar mediante asesoramiento tanto a los progenitores como a los menores para facilitar las relaciones materno y paterno filiales.