El primer semestre del año se salda con 279 accidentes y dos fallecidos

Rocío Perez Ramos
Rocío Ramos LALÍN, A ESTRADA / LA VOZ

DEZA

Cedida

La Guardia Civil de Tráfico cifra en 55 los heridos, 50 leves y 5 graves

17 jul 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

La Dirección General de Tráfico cifra en 279 los accidentes ocurridos en las vías interurbanas de las comarcas de Deza y Tabeirós-Terra de Montes, según los datos traslados por la Subdelegación del Gobierno de Pontevedra. En esta relación de siniestros se contabilizaron un total de 55 personas heridas. La inmensa mayoría: 50, fueron heridos leves, a los que se sumaron un total de cinco heridos graves.

En este primer semestre del año hubo que lamentar el fallecimiento de dos personas. Uno de esos accidentes mortales se produjo el pasado mes de febrero. El 18 de febrero perdía la vida un vecino de Boiro de 45 años que chocó contra un árbol cuando practicaba motocrós en una pista forestal de Silleda.

El accidente se produjo en torno a las 10.15 horas de un domingo en una pista de la parroquia de Escuadro en un tramo sin asfaltar que arte de este núcleo hacia la Fervenza do Toxa, Hasta allí el fallecido había ido con un grupo de amigos para practicar esta afición. El motorista perdió el control de la moto, saliéndose de la vía y acabó estrellándose. Cuando llegaron los equipos sanitarios ya nada pudieron hacer por su vida.

El otro accidente mortal se produjo el 18 de marzo. Falleció una vecina de Agolada de 37 años tras ser atropellada por un camión. El accidente tuvo lugar a las 4.40 horas en el kilómetro 147,2 de la carretera nacional 640 a la salida del casco urbano de Agolada. Fue el conductor del camión el que llamó al 112 tras notar un impacto. La espesa niebla que había le impidió ver en un primer momento si había chocado contra una persona o un animal. Al bajarse del vehículo pudo ver los daños y, seguidamente a la víctima. La mujer no llevaba chaleco reflectante y al parecer sufrió un golpe en la cabeza y falleció en el acto. La mujer, de origen brasileño y madre de tres hijos, regentaba un bar con su pareja y al parecer regresaba a casa caminando cuando se produjo el atropello. El conductor, que dio negativo en las pruebas de alcohol y drogas practicadas por la Guardia Civil de Tráfico, resulto ileso y al parecer circulaba a una velocidad adecuada.

El año pasado se produjeron en la zona 573 accidentes y hubo que lamentar tres víctimas mortales, ocho heridos graves y 142 leves. El número de accidentes producidos en el primer semestre de este año está en consonancia con la media de los últimos años, a excepción de los de la pandemia en los que una menor movilidad junto con el confinamiento se tradujeron en un descenso de la siniestralidad en las carreteras de la zona.

En la zona se contabilizaron 195 positivos por alcohol y 93 por drogas

Desde la DGT cifran en 12.270 las pruebas de alcoholemia realizadas a otros tantos conductores a lo largo del primer semestre de este año. De ellas 195 resultaron positivas. A estas se suman 251 pruebas de drogas realizadas por los agentes, de las cuales 93 de ellas dieron positivo.

En parte de los accidentes que tuvieron lugar en la zona se vieron animales implicados. Fueron 135, un parte fueron atropellos de jabalíes.

De enero a junio de este año, los agentes de la Guardia Civil de Tráfico cursaron en las comarcas de Deza y Tabeirós-Terra de Montes, un total de 2.260 denuncias a diferentes conductores. Todas ellas llevaron consigo la detracción de puntos por diversas sanciones y multas por diferentes causas.

La importancia del chaleco reflectante y refuerzos en controles en las carreteras

A lo largo del año, las campañas de la Guardia Civil siguen incidiendo en medidas de seguridad que salvan vidas como puede ser la obligatoriedad de llevar puesto el cinturón de seguridad. Una medida a la que se suma la divulgación, a través de las charlas de Plan Director que realiza la Guardia Civil, sobre todo entre los mayores del rural de ponerse un chaleco reflectante cuando uno va a caminar y que ayuda a evitar atropellos.

Este verano la Guardia Civil de Tráfico anunciaba la puesta en marcha durante estos meses estivales de un mayor control en las carreteras reforzando el control del alcohol con la práctica de pruebas de alcoholemia a los conductores. Desde la Guardia Civil se incidía en trayectos cortos que muchas veces acarrean un gran peligro y concentran parte de los accidentes como son los de regreso tras verbenas y fiestas varias. Para la DGT el alcohol y las drogas continúan siendo graves problemas para la seguridad vial. Se anunciaba para todo el verano una mayor vigilancia con el helicóptero, radares y cámaras.

Fuera de las competencias de Tráfico, en las vías urbanas, como A Estrada y Lalín se llevan produciendo atropellos. En A Estrada la Policía Local demanda mayores medidas de seguridad en la nacional en el casco urbano.