Un mejor funcionamiento de las repoblaciones, tanto de conejo como de perdiz, junto con unas temperaturas elevadas que evitaron en la mayoría de los montes, que las enfermedades diezmaran la población de conejos hace que hoy los cazadores salgan al monte con más ilusión y mejores perspectivas. La sensación general es que hay más caza. Hoy la previsión es de lluvia, y la bajada que se espera de las temperaturas beneficia también a esta primera jornada. El presidente de la asociación de caza de Lalín, José Luis Montoto, señala que «os cans a partir dos 20 graos, sufren».
Destaca que «nas zonas onde traballamos os biotopos funcionaron moi ben». Las repoblaciones tanto de conejo como de perdiz también fueron bien en otros tecores de la zona como es el caso del de Dozón. La otra cara de la moneda es un 10% del tecor, cifra el presidente de la agrupación, José Rodríguez, afectado por los incendios y que está quemado. Eso hace que no pueda cazar hasta 3 años después, que se cumplirían el 31 de diciembre del 2028. O antes «no caso de que o monte rexenere rápido e os axentes de Medio Ambiente den o visto bo de que está xa ben».
En Forcarei, el presidente del Tecor de Acibeiro explica que «hai bastante coello e perdiz. Fai anos que os socios non están tan animados porque hai caza». En Lalín, apunta Montoto, «no coello, este ano ven a ser un calco do anterior. A perdiz ten boa pinta e a lebre se mantén e nalgúns casos aumentou un pouco e faisáns hai algúns exemplares». En lo que coinciden los responsables de las agrupaciones de caza de la zona es el repunte del zorro. Cuenta que «hai moitísimos», tantos que alguno profetiza la posibilidad de aparición de algún brote de sarna. La liebre se estabiliza en algunas zonas y aumenta en otras. En cuanto al jabalí, en la zona se mantiene la alerta cinegética, y las batidas. En Dozón, dada la proximidad con zonas de Ourense y la cantidad de incendios, cuentan que, acabado el ensilado del maíz, empiecen a llegar ejemplares en busca de refugio en esta zona.