El grupo de gobierno de Agolada votó en solitario la Conta Xeral del pasado año con el rechazo de PP y BNG. Fue a la segunda. La prohibición de debatir el punto del regidor hizo que los ediles de la oposición cedieran no votar y finalmente, tras abordar otros puntos, el regidor cambiaba de idea y abría la posibilidad de debate. La oposición se quejó, entre otras cosas de falta de información.
Se debatieron cinco mociones del PP, rechazadas con el voto en contra del PAYJ y una del BNG, rechaza por el PP, y aprobada por gobierno y BNG. Los nacionalistas pidieron la adopción de medidas para evitar que se repitieran incendios como los del verano en Agolada mediante una política de prevención y una gestión integral del medio demandando responsabilidades y la dimisión de Rueda.
El BNG también votó a favor de las mociones del PP pidiendo labores de acondicionamiento en Quinteiro, el refuerzo de la vigilancia, la protección de Os Pendellos y, con una enmienda, adjudicar horas pendientes del SAF. Se abstuvieron en la moción que pedía un servicio de información municipal sobre las ayudas por los incendios y votaron en contra de la crítica a la política de Sánchez.