Forcarei firma el convenio con el Arzobispado para ampliar el cementerio parroquial de Soutelo
FORCAREI
La alcaldesa de Forcarei, Verónica Pichel, y el ecónomo de la diócesis de Santiago, Fernando Barros, acaban de firmar un convenio de colaboración entre el Concello de Forcarei y el Arzobispado de Santiago para regularizar la cesión gratuita de la parcela municipal donde se emplaza el cementerio parroquial de Santa María Magdalena de Soutelo de Montes, para que se pueda destinar a ampliar las instalaciones del camposanto.
El convenio contempla la cesión al Arzobispado de Santiago, con carácter gratuito, de la plena propiedad de la parcela en la que se localiza el cementerio (gestionado de forma íntegra desde 1913 por la parroquia), incluyendo la superficie solicitada para destinarla a la ampliación del camposanto con la construcción de nuevos panteones. La parcela en cuestión tiene una superficie total de 1.531,55 metros cuadrados.
A la reunión, celebrada en la sede del Arzobispado de Santiago, también asistieron el vicario general, Andrés Fernández Farto; el párroco de Soutelo y nuevo arcipreste de Montes (de 42 parroquias de los concellos de Forcarei, Cerdedo-Cotobade y Campolameiro), Saúl Retamozo; y Marisol Gutiérrez, vecina de Soutelo de Montes y una de las promotoras para que este convenio pudiese formalizarse.
Las gestiones para poder llegar a materializar este acuerdo vienen de bastante tiempo atrás, después de varios años de trámites en los que el Concello forcaricense consiguió completar la corrección de anomalías históricas sobre la finca en cuestión, con el objetivo de atender la petición de cesión realizada por la Iglesia y por los vecinos de la zona.
La solicitud se remonta al año 2018, cuando el administrador parroquial de Santa María Magdalena y un grupo de vecinos le pidieron al Concello la donación de un terreno adyacente al cementerio para poder ampliarlo. En 2020 reiteraron esta solicitud, en esta ocasión al gobierno de Verónica Pichel, y se celebró un encuentro en el Arzobispado en el que, tras detectar diferentes anomalías con respecto a la parcela, el gobierno local se comprometió a realizar la corrección de las mismas. Así, desde el Concello, con la colaboración de dos vecinos de Soutelo y del Arzobispado se pudo documentar la titularidad de la parcela original y la concesión de licencia para el cementerio en 1913.