Está descartado celebrar la Encomenda, el desfile o la feria de productos, mientras ahora se iniciará la búsqueda de pregonero en un año marcado por la pandemia
27 ago 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Lalín no se quedará este año sin su reclamo gastronómico más universal. Será una edición entre testimonial y simbólica, con muchos menos aderezos, pero que permitirá dar continuidad a esta fiesta de interés turístico internacional. Marcada por la pandemia, pero con retraso habrá LIII Feira do Cocido. La fecha, el 26 de septiembre, la anunció ayer el alcalde, José Crespo, acompañado por la concejala de Cultura, Begoña Blanco; la de Sanidade, Eva Montoto; y el de Festas, José Cuñarro.
La carpa instalada en el campo da feira acogerá los actos del Cocido, donde se centrarán también otras iniciativas culturales y las fiestas de As Dores. Tendrá capacidad para quinientos asientos. Crespo incidió en que ni él personalmente ni el gobierno local quería un aplazamiento de la fiesta gastronómica. Ya se contaba con cartel y pin diseñados por Paco Pestana, además de la entrega de los premios de periodismo Álvaro Cunqueiro o de Gastronomía de Galicia, junto con un condicionado Mes do Cocido por el covid-19, entre algún otro pequeño acto.
El regidor lalinense apuntó la pretensión de que este atípico Cocido sirva casi de pistoletazo de salida para el del 2022, confiando en que pueda celebrarse con normalidad. Recordó fiestas importantes como los Sanfermines suspendidas y no quería que ocurriese lo mismo con el Cocido. Además, destacó el importante volumen de personas que acudieron en agosto a degustar el plato. Ahora sus esfuerzos se centrarán en encontrar protagonista para la lectura del pregón, aún sin ningún nombre en cartera «porque non sabíamos se poderíamos facer». Parece decantarse porque sea una voz femenina la que ensalce las virtudes de estos manjares.
En esta atípica edición se descarta recuperar la Encomenda do Cocido, además del desfile -vinculado en años anteriores al Entroido- o el mercado de productos cárnicos, entre otros. Todo ello por cuestiones sanitarias y dada la necesidad de cumplir un estricto protocolo anticovid. Sí que habrá la habitual recepción al pregonero además de que imponga sus manos en cemento y se prevé alguna iniciativa paralela, quizás vinculada a la artesanía o música, que se pueda encajar con esas medidas sanitarias.
El Concello podrá recibir las ayudas de Xunta y Diputación
Crespo destacó que la amplia programación que se abre hoy y concluye con la Feira do Cocido dentro de un mes, durante todos los fines de semana, busca dar vida a Lalín, beneficiando a su hostelería y comercio, pero siempre cumpliendo las condiciones fijadas por las autoridades sanitarias. «Os lalinenses poderán saír da casa e desfrutar de actividades despois de tanto tempo», apuntó. La inmensa mayoría de actos serán en la carpa del campo da feira vello, aunque habrá una segunda en la plaza junto a la biblioteca municipal.
Respecto a la fiesta gastronómica, incidió en que los actos programados permitirán recibir las subvenciones previstas de Xunta y Diputación, en este segundo caso para el Cocido Miúdo de los días 11 y 12. «É mellor que os cartos queden en Lalín e poderemos xustificar esas axudas», argumentó el regidor.