Exhiben un imaginario místico creado por alumnos en la casa del conserje
22 jun 2024 . Actualizado a las 05:00 h.La casa del conserje del IES Aller Ulloa de Lalín se convirtió en un espacio expositivo singular que los alumnos de primero de BAC de Artes del centro, de la mano de su profesor Pedro Alonso Cascallana, dedican al misticismo, las leyendas, los rituales y a un imaginario que bebe de la tradición y que toma forma de instalaciones artísticas que crean un ambiente de fantasía y cierto terror. Una muestra titulada Rituais realizada a lo largo del último trimestre del curso y que estará abierta al público en horario de mañana a partir del lunes.
La propuesta es una experiencia de inmersión artística que, explica Alonso, se vive con la ayuda de la música, el propio espacio, la iluminación y las obras de arte junto con el uso del vídeo, técnicas audiovisuales, un holograma 3D, la escultura y la pintura. Nada más cruzar el umbral de la puerta, la exposición la abre una Virgen cibernética que cuenta con un QR que ofrece al visitante información de las leyendas que se explican audiovisualmente, el porqué del proyecto y qué es lo que se pretende reflejar. en la exposición.
Una de esas instalaciones está dedicada a O Corpiño «basada na obra de un artista internacional de Segovia que é Gonzalo Borongo e intentamos seguir algunha das súas obras». Cuenta con 9 pantallas que emiten un mismo vídeo y hay dos ofrendas escultóricas simulando las que se depositan en el santuario y que en este caso son un corazón y un cerebro que representan, apunta Pedro Alonso, «a razón e o sentemento que hai detrás de todo isto e coa repetición das imaxes nas nove pantallas quixemos transmitir esa tradición oral que deu pé a todo este inventario místico galego». Le sigue una sala dedicada a las leyendas con el diablo y el espantapájaros, que son dos esculturas en un espacio decorado e iluminado por un grupo de alumnas.
Un dragón marino
Hay una sala dedicada al mar con un holograma 3D «un vídeo en catro partes que se reflicte nunha pirámide truncada invertida. É una pirámide feita en metacrilato e esas catro imaxes reflíctense nas paredes e consíguese ese efecto dun 3D no medio e é un holograma no que aparece un dragón marino en bucle facendo que te morde». En esa misma zona «temos tamén unha maruxaina, que é a serea, que está feita con redes de pesca e en diferentes capas e pintada con pinturas fluorescentes. Cunha luz negra reflicten brillos que parecen destellos do mar e unha estética moi lograda».
La última sala es la de los muertos con dos asesinados. Uno es un abad de Monforte de Lemos al que un noble mata con una cuerda de hierro tras enterarse de que este estaba intimando con su hija y se refleja en una escultura. La otra es Inés de Castro que intentó casarse con el rey de Portugal y a la que mataron los nobles lusos que se oponían al enlace. El rey la instala en el trono una vez muerta «e hai unha man que a nena di que tes que besar e as dúas esculturas están xuntas nunha especie de altar decorado e iluminado».
La Santa Compaña
En este mismo espacio se encuentra también una instalación de la Santa Compaña y que se construye con una serie de metacrilatos puestas en fila creando una sensación de profundidad. Se cierra la muestra con un Corredor dos Cánidos protagonizado por el perro del Urco realizado con pinturas fosforescentes y que es «un can que sae do mar arrastrando unhas cadeas e cunhs cornos enormes, nos que as cadeas e os cornos son volumétricos e o resto é un mural feito sobre cartón». A este se suma un Lobishome con fotografías realizadas a dos alumnos; uno más corpulento y otro más menudo y cuyo montaje crea la transformación de un hombre en hombre lobo elaborada con fotografías, animación en vídeo y transformación digital. La exposición fue realizada por Elba Couso Patiño, Javier Alejandro Cuíña García, Santiago Fernández Fuentes, Antía Fernández Rodríguez, Aitana Gosenje Blanco, Sofía Ogando Malvar, Jesús Alexander Oro Atencio, Paula Pájaro Romero, Ana Victoria Pérez Vallejos, Julieta Ramos Sosa, Mar Taboada Montoto, Noelia Tarrío Creo y Laura Vázquez Fernández en la asignatura de Proxectos Artísticos.