Adiós en Lalín al cura que ejerció en tierras lucenses

j. b. LALÍN / LA VOZ

LALÍN

OSCAR CELA

13 nov 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

En la iglesia de Santa María de Noceda, la parroquia de Lalín donde había nacido hace 86 años, se daba ayer el último adiós al reverendo Ángel Castro Granja. El obispo de Lugo, Alfonso Carrasco Rouco, ofició la misa de funeral de un sacerdote que siempre ejerció en tierras lucenses desde su ordenación en 1965 por Antonio Ona de Echave, una vez completados sus estudios eclesiásticos.

El primer destino de Ángel Castro fue en 1967 como coadjutor de Santa María de A Régoa, en Monforte de Lemos. En 1982 fue nombrado responsable del equipo parroquial que atendía diversas comunidades, como las de San Xoán de Becerreá. En 1985 asumió el oficio de ecónomo de San Lorenzo de Villarmiel y fue designado arcipreste de Ferreiros de Balboa, mientras en 1990 ejerció como asesor religioso del CEIP de Becerreá. Ya en 1994 ejerció su labor pastoral como párroco de San Xoán de Becerreá. Fallecía este martes en Noceda, donde vivía desde hace cinco años.