El BNG insistía ayer en la necesidad de adoptar medidas ante la preocupante situación en que se encuentra el centro de salud de Silleda. Denuncia esta formación la existencia de filtraciones de agua y aire por las ventajas, teniéndose que recoger mediante cubetas o toallas del Sergas y afectando a la temperatura ambiental dentro del edificio.
Esas filtraciones, alertan, están causando humedades en las paredes con el consiguiente riesgo para la salud de los usuarios del centro médico y con afectación posible a la estructura del inmueble. Recuerdan desde el BNG que ya denunciaron esta situación en abril del pasado año en el pleno, a través de una moción aprobada por mayoría para reclamar a Sanidade una solución que no llega, con la remisión de un informe de todos los problemas existentes. Incluían la reforma de la rampa de acceso al resultar resbaladiza en días de lluvia, apuntando el caso de una usuaria que este mes se fracturó una mano tras patinar en esa entrada.
La formación nacionalista elevó esta problemática al Parlamento mediante varias preguntas y una proposición no de ley para instar a la Xunta al adecuado mantenimiento del centro.