El euro saca partido de la debilidad de la economía de EEUU y alcanza el nivel más alto en dos años La única huelga que se dejó sentir ayer en la Bolsa española fue la de las compras. La tormenta vendedora de las últimas semanas arreció en el parqué, dejando al Ibex en los niveles en los que se encontraba dos semanas después de los atentados terroristas del 11-S. Mientras tanto, el euro aprovechó los malos datos de la economía estadounidense para superar la barrera de los 0,96 dólares.
20 jun 2002 . Actualizado a las 07:00 h.La jornada de huelga general convocada por los sindicatos se convirtió en la Bolsa española en otra sesión para el olvido. Tanto es así que el Ibex 35 marcó un nuevo mínimo anual después de caer un 2,11% y cerrar en 7.060,30 puntos, niveles que no se recordaban desde finales de septiembre pasado, cuando la crisis desatada por los atentados terroristas del 11-S se encontraba en todo su apogeo. Las ventas se impusieron en los parqués europeos desde primera hora de la mañana, arreciaron a medida que avanzaba el día y golpearon con especial virulencia sobre las cotizaciones de los valores tecnológicos y las empresas de telecomunicaciones. En esta ocasión, el varapalo para el sector llegó de la mano de Nokia. Y es que el mayor fabricante de teléfonos móviles del mundo recortó sus previsiones de ventas para el segundo semestre de este ejercicio y los años posteriores como consecuencia de la caída del gasto en telefonía de las empresas y la ralentización de la demanda. En la Bolsa española, sólo tres de los 35 valores que integran el Ibex lograron acabar el día en positivo: Dragados, que subió un 0,6%; FCC, que ganó un 1%) y Acerinox, que avanzó el 0,3%. La peor parte se la llevaron Sogecable, con un descenso del 5,4% y Terra, cuya cotización cayó un 4,7%, hasta los 4,92 euros, el nivel más bajo desde su salida a Bolsa en noviembre de 1999. Telefónica también sufrió lo suyo, con un descenso del 2,5%, que dejó el precio de las acciones por debajo de los nueve euros, algo que no sucedía desde octubre de 1998. Ahora, los analistas temen que el Ibex acabe perdiendo el nivel de los 7.000 puntos. Dicen que la caída de compañías que hasta el momento se estaban comportando bien, como el caso de Altadis, indican que los inversores están optando por realizar plusvalías en los valores que aún lo permiten para obtener liquidez y volver a entrar en Bolsa cuando se produzca el tan ansiado rebote. En el resto de las Bolsas europeas, los descensos oscilaron entre el 2,6% de París y el 1,6% de la Bolsa de Londres. Mientras las bolsas sufrían de lo lindo, en el mercado de divisas el euro proseguía su particular escalada alcista, espoleado por nuevos y desalentadores datos sobre la economía estadounidense. El aumento del déficit de la balanza comercial norteamericana hasta un nuevo récord histórico le sirvió a la moneda única para dar un paso muy importante en su camino hacia la paridad con el dólar. Así, a última hora de la tarde, el euro se pagaba en los mercados a 0,9617 dólares, la cotización más alta desde junio del 2000. Desde que comenzó el año, la divisa de la Unión Europea se ha revalorizado más de un 8% frente al billete verde estadounidense.