La caja gallega y otras dos entidades inyectan 24 millones y pasan a controlar el 22% del capital de la firma Gayoso prevé que nuevas firmas se unan al proyecto de concentración.
01 ago 2003 . Actualizado a las 07:00 h.Caixanova, Caja Castilla, Caja de Burgos y el Grupo Calvo cerraron ayer en Vigo una operación histórica por la que las entidades financieras suscriben una ampliación de capital en Calvo por valor de 24 millones de euros. De esta forma, la caja gallega pasa a controlar el 11% del capital de la empresa, mientras que cada una de las otras dos entidades se hace con el 5,5%. Pero la operación es sólo el germen de una espiral de nuevos movimientos financieros y empresariales de gran calado que se producirán en el sector conservero gallego en los próximos meses. Caixanova firma así el desembarco en uno de los sectores tradicionalmente más herméticos a la entrada de capital no familiar, y dirige sus pasos a la creación de un gran grupo transformador de productos de la pesca. «Esperamos que otras empresas del sector se unan a este proyecto», explicó ayer el director general de Caixanova, Julio Fernández Gayoso, tras firmar con José Luis Calvo, presidente del grupo consevero, el documento que los hace socios. Fondos propios La ampliación realizada incrementa los fondos propios del Grupo Calvo desde 62 millones hasta 98 millones de euros, lo que representa un incremento del 58%. Se trata de una ampliación de capital y de doce millones de euros adicionales instrumentalizados como una deuda. Con esta operación, la empresa familiar con sede en Carballo da entrada en su capital a nuevos socios por primera vez en su historia. Las tres entidades financieras entran a formar parte del accionariado de Calvo para consolidar la estructura económica del grupo pesquero multinacional y respaldar los planes de expansión internacional de la compañía. Calvo calcula alcanzar una cifra de ventas en el 2005 de 350 millones de euros, frente a los 270 millones que prevé facturar este año. El pasado ejercicio, la conservera facturó 235 millones, con un beneficio de 23,8 millones de euros. Después de firmar en privado los documentos que los hacen socios, Julio Fernández Gayoso y José Luis Calvo expresaron su convicción de que «ojalá» éste no sea el fin de una experiencia hasta ahora inédita. En medios de la industria conservera se especula también que en esta operación subyace la compra o absorción, de aquí a unos meses, de nuevas industrias por parte de Calvo. La coincidencia de peso de que el presidente de Caixanova, Guillermo Alonso Jáudenes, sea propietario también de la conservera que comercializa la marca Palacio de Oriente, la sitúa, precisamente, en la órbita de los primeros objetivos del Grupo Calvo. Con todo, Fernández Gayoso dijo que, «de momento», no hay conversaciones ni con ésta ni otra firma del sector. Atomización La atomización del sector, con más de 55 fábricas en toda Galicia, la hace especialmente apetecible para un proyecto de redimensionamiento del sector liderado por las entidades financieras. Además, desde el punto de vista productivo se han producido experiencias de mayor o menor envergadura.