Los autónomos piden un nuevo IRPF que ajuste lo que se paga a la rentabilidad de cada negocio

ECONOMÍA
El colectivo de los autónomos, que engloba en Galicia a unas 200.000 personas, abrirá en los próximos meses un nuevo frente de batalla con el Gobierno central. Aprobado y en vigor su nuevo estatuto, en el que se le reconocen derechos como la prestación por desempleo o la baja por enfermedad, estos trabajadores plantearán una reforma del IRPF para que el marco fiscal se ajuste a la rentabilidad de cada negocio. Casi un tercio de los autónomos tributan por módulos objetivos, con lo que pagan una renta fija trimestral. Los criterios que determinan cuánto se abona permanecen invariables desde la década de los setenta y eso ha hecho que profesiones con rentabilidades más bajas, como los taxistas, tengan un módulo trimestral muy alto. También sucede al contrario: otras actividades, como la hostelería, generan beneficios muy elevados en relación con lo que pagan.
«Está claro que los parámetros están anticuados y así se lo hemos hecho saber al Gobierno central, que todavía no ha contestado: le plantearemos más adelante una propuesta oficial, pero hemos encargado antes un estudio a la Universidad de Santiago y a la Complutense de Madrid», explicó ayer en Compostela Sebastián Reyna, secretario general de la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA), quien participó en un simposio promovido por su organización en la capital gallega para analizar el nuevo marco legal de estos profesionales. «Por poner un ejemplo: un comercio tiene el mismo módulo en una calle céntrica de una gran ciudad que en una calle de la periferia: y no es lo mismo estar en Serrano que en Leganés; las rentabilidades varían considerablemente», precisó ayer el máximo responsable de la organización.
Impuesto cero
En la propuesta definitiva sobre reforma fiscal que los autónomos harán llegar al Gobierno también se incluye que los jóvenes y las mujeres tengan en el IRPF impuesto cero durante los dos primeros años de actividad. También pondrán encima de la mesa otra iniciativa: que la adquisición de medios tecnológicos compute como deducción para aquellos autónomos que no abonan el IRPF por módulos sino por estimación directa, es decir, en función de la renta neta. «Del mismo modo que la inversión en I+D es deducible en el tributo de sociedades, nosotros demandamos, como empresarios, un trato parecido», explicó ayer Reyna.
Santiago reunió ayer en un foro de debate a juristas, altos cargos del Estado y representantes de los autónomos para analizar el desarrollo del nuevo estatuto que regula la profesión.
Los trabajadores por cuenta propia podrán cotizar para recibir una compensación económica por cese de la actividad (desempleo), tal y como figura en el marco regulatorio, pero este nuevo derecho lo desarrollará una ley propia.
A partir del próximo mes de enero, estos profesionales podrán cotizar por incapacidad temporal, tal y como anunció el pasado miércoles en el Congreso el ministro de Trabajo, Jesús Caldera. El nuevo estatuto les reconoce también la jubilación anticipada, las bajas por maternidad y paternidad y la posibilidad de contratar a los hijos por cuenta ajena.