La decisión facilita el nacimiento el próximo jueves de General Motors Company (GMC), la «nueva» compañía que se hará con los activos rentables de GM.
08 jul 2009 . Actualizado a las 09:38 h.El juez que supervisa la quiebra de General Motors (GM) rechazó esta noche las mociones de dos grupos opuestos al plan de reestructuración de la compañía para acelerar el proceso de apelación.
La decisión del juez Robert Gerber del Tribunal de Quiebras de Nueva York facilita el nacimiento el próximo jueves de General Motors Company (GMC), la «nueva» compañía que se hará con los activos rentables de GM.
Gerber aprobó en la noche del domingo la venta de activos de GM a la «Nueva GM», el principal paso en la reestructuración del mayor fabricante estadounidense de automóviles y que se declaró en quiebra el pasado 1 de junio.
El juez había justificado su decisión en favor de la creación de la «Nueva GM», a lo que se oponen algunos acreedores y víctimas de accidentes en los que estuvieron implicados automóviles de GM, para evitar «el desastroso resultado» de la liquidación del principal fabricante estadounidense de automóviles.
Gerber también había dado hasta el jueves al mediodía como plazo para que los grupos opuestos presenten sus objeciones a la venta de los activos.
Los dos grupos querían que Gerber les autorizase a presentar apelaciones a su decisión del pasado domingo directamente ante el Tribunal de Apelaciones en vez de en los tribunales de distrito como es habitual.
Si nada cambia, el jueves el Departamento del Tesoro estadounidense y las autoridades canadienses darán casi 60.000 millones de dólares a GMC para la compra de los activos rentables de GM, creando de forma efectiva la «Nueva GM».
La empresa estará formada por cuatro marcas (Chevrolet, Cadillac, Buick y GMC) en vez de las ocho actuales.
La propiedad de GMC estará divida entre el Gobierno estadounidense (60,8 por ciento), el sindicato United Auto Workers (UAW, 17,5 por ciento), las autoridades canadienses (11,7 por ciento) y los acreedores de GM (10 por ciento).
Washington ya ha anunciado que quiere desprenderse de su participación en el 2010, tan pronto como GMC esté lista para iniciar una oferta pública de acciones.