El ministro Valeriano Gómez aspira a cambiar la reforma laboral sin alterar el texto

Elisa García MADRID/COLPISA.

ECONOMÍA

24 oct 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

El nuevo ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, ha de cambiar la reforma laboral para acercarse a los sindicatos, pero sin tocar el texto de la ley porque la Moncloa es intransigente y rechaza un paso atrás. También tiene que modificar las pensiones de la Seguridad Social. Aquí el mayor obstáculo es la congelación anunciada por el presidente José Luis Rodríguez Zapatero para estas prestaciones en el 2011. La medida cayó como un jarro de agua fría en el Congreso de los Diputados y dejó tocada a la comisión del Pacto de Toledo, donde se vela por el sistema público de protección social.

Los sindicatos recelan del cambio realizado en el ministerio por el jefe del Ejecutivo. Saben, sobre todo UGT, que Gómez tiene talante conciliador y que conoce las claves del mercado laboral y sabe qué teclas no se deberían haber tocado. Su opinión estuvo presente en la confección de la reforma laboral. Otra cosa es que sus propuestas no tuvieron demasiado éxito.

Para impedir que la recuperación de la paz social sea un camino de espinas, tiene que hacer gestos en los próximos días. Cándido Méndez considera imprescindible saber con qué margen de maniobra cuenta el nuevo ministro. «Ya puede ser la mejor persona del mundo que si está atado de pies y manos frente a Economía nada podrá hacer», comentaba antes de conocerse públicamente el nombramiento de Gómez. Para CC.?OO., el cambio en la reforma solo puede venir por otra ley.

Más peso a empleo

Zapatero ha promovido a un mayor rango el departamento que se encarga del mercado laboral, que pasa de secretaría general a secretaría de Estado. Responde con ello a una antigua reivindicación de Gómez y establece un equilibrio «de igual a igual» en determinadas negociaciones con Economía.

Para afrontar su mandato, Valeriano Gómez se ha rodeado de personas de confianza. Como jefe de Gabinete está Antonio González, técnico de UGT que fue asesor del ex titular de Trabajo, Jesús Caldera. Igualmente cuenta con otra ex asesora de este, Mary Luz Rodríguez, consejera de Empleo de Castilla-La Mancha, ahora secretaria de Estado de Empleo.