La fábrica principal de Panrico rechaza el nuevo preacuerdo

La Voz

ECONOMÍA

Al no respaldar la propuesta aboca a la compañía al temido concurso de acreedores

23 nov 2013 . Actualizado a las 22:28 h.

Tras dos meses de idas y venidas entre empresa y sindicatos con una huelga desconvocada a última hora, el futuro de Panrico ha pasado de gris a negro en los últimos días. Mientras, el paro indefinido de sus 1.800 repartidores autónomos -en protesta por el impago de las facturas del mes de octubre- ha dejado sin distribución a sus productos, como los Donuts, desde el jueves pasado.

El último capítulo se vivió este sábado en todas sus plantas: Puente Génil (Córdoba), Valladolid, Paracuellos del Jarama (Madrid), Zaragoza y Santa Perpètua de Mogoda (Barcelona). Algo más de 1.800 empleados estaban llamados a votar el preacuerdo alcanzado con UGT y CC OO. La mayoría de centros terminaron respaldándolo o absteniéndose, pero su principal fábrica, la de Cataluña, inclinó la balanza hacia el «no». Ya lo había avisado a principios de semana en una primera consulta. Apenas una minoría de ellos respaldaba un documento que prevé el despido del 40% de la plantilla (745 personas hasta el 2016 con una indemnización de 25 días por año trabajado y un tope de 14 mensualidades) y una rebaja salarial del 18%. Y este sábado se repitió la misma situación.

La clara divergencia entre esta planta y el resto puede explicarse porque el centro barcelonés lleva en huelga varias semanas y parte de su producción se ha ido trasladando al resto. Llegados a este punto, los sindicatos intentarán retomar una negociación cada vez más complicada con la empresa, pero la dirección de Panrico tiene claro que el tiempo casi se ha agotado. Con unas pérdidas que crecen en 150.000 euros al día y una deuda superior a los 700 millones, la falta de liquidez impide pagar a los repartidores y echa por tierra buena parte de su producción, en su mayoría perecedera. El concurso de acreedores se antoja cada vez más cercano.