La prima de riesgo baja de 170

mercedes mora REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Vuelve a niveles que no se recordaban desde septiembre del 2010

12 mar 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Tres años y medio y cientos de sobresaltos después, la prima de riesgo española vuelve a estar por debajo de los 170 puntos. A 168 cerró ayer. Y eso que no andan las aguas europeas lo que se dice especialmente tranquilas. Con todos los ojos del Viejo Continente posados en Crimea. Pero, ¿qué es lo que ha pasado para que la deuda española, de la que los inversores huían a toda prisa en lo peor de la tormenta, haya recuperado el favor del mercado? Tres son las principales argumentos que esgrimen los analistas para explicar el cambio de rumbo.

La periferia está de moda

En la agenda de los grandes inversores. La periferia europea ha dejado de ser una apestada. Los grandes inversores institucionales confían en la recuperación de países como España, Portugal o Italia. Y están comprando sus bonos. Sobre todo, ahora que los emergentes están de capa caída.

Alemania pierde brillo

La crisis de Ucrania golpea a la locomotora europea. Son muchos los intereses que la todopoderosa Alemania tiene en el Este de Europa. Y la crisis de Ucrania no le está sentando bien, ni a su bolsa, ni a su deuda. El Tesoro germano ha tenido que elevar los intereses en las últimas subastas y, en el mercado secundario -donde se negocian los títulos ya emitidos por los Estados- la rentabilidad del bono a diez años -el que se emplea para calcular la prima de riesgo- está subiendo. Ayer se les exigía un rendimiento del 1,64 %. A los españoles, del 3,32 %, más del doble.

Mejora del «rating»

Moody's abre el camino. Las agencias de calificación de riesgos, tan duras con España durante la crisis, empiezan también a verla con otros ojos. La primera en levantarle el castigo ha sido Moody?s, que el 21 de febrero pasado sorprendió al mercado elevando un escalón la nota de la deuda patria, de Baa3 a Baa2, alejándola así de la consideración de bono basura. Además, los expertos de la firma mejoraron la perspectiva de estable a positiva, dejando así la puerta abierta a nuevas mejoras de la nota cuando vuelva a revisarla. Ahora el mercado espera que las otras dos grandes del negocio del rating, Standard & Poor's y Fitch hagan lo propio más pronto que tarde.

Financiación más barata

El Tesoro aprovecha el tirón. España navega ahora en una balsa de aceite. Atrás quedaron las procelosas aguas de la tormenta. Y el Tesoro, para quien salir al mercado durante la crisis era toda una odisea, se financia ahora con facilidad. Y, lo que es mejor, a tipos históricamente bajos en los plazos cortos. Ayer mismo, colocó más de 4.500 millones de euros en letras a seis meses y un año, por las que se comprometió a pagar los intereses más bajos de la serie histórica, que arranca en el año 2001. Emitió algo más de mil millones a seis meses, a un tipo medio del 0,366 % y más de 3.500 a un año, al 0,544 %. Desde que empezó el año, el Tesoro ha logrado recaudar casi 39.500 millones, casi un tercio de lo que se ha propuesto captar a lo largo de este ejercicio: 133.300 millones de euros. El coste medio de emisión, a 28 de febrero, es del 2,31 %, por debajo del 2,45 % del cierre del 2013. La caída de la prima de riesgo le ahorró el año pasado al Estado más de 8.000 millones en intereses.

Próxima estación

A por los 150 puntos. Los analistas tienen claro que la prima de riesgo continuará bajando, y son muchos los que aventuran que no tardaremos en verla en los 150 puntos, o incluso por debajo. Lejos quedan los casi 650 de julio del 2012, cuando Draghi agarró el toro por los cuernos.