Bankia dice que podría asumir sin ayudas un revés judicial sobre su salida a Bolsa
ECONOMÍA
De Guindos acusa al Gobierno socialista de forzar la operación y de obligar a los supervisores a que miraran para otro lado
11 dic 2014 . Actualizado a las 05:00 h.«En el eventual caso de que la salida a Bolsa fuera puesta en cuestión, y es una hipótesis que está muy muy en el aire, incluso en ese momento, el grupo BFA-Bankia tiene músculo suficiente para hacer frente a esa eventualidad sin pedir dinero a los contribuyentes». Así de contundente se mostró ayer el presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, en su primera intervención pública tras conocerse los demoledores informes periciales realizados por inspectores del Banco de España, a petición de la Audiencia Nacional, sobre el proceso de reestructuración y la salida a Bolsa de la entidad que preside.
De este modo, sin referirse explícitamente a ello, sostuvo que la firma podría asumir que sin recurrir a más ayudas públicas las potenciales demandas de quienes se convirtieron en accionistas en julio del 2011 por importe total de 3.090 millones de euros.
Durante su intervención en el primer Congreso Nacional de Directores Financieros, organizado ayer en Madrid por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD), Goirigolzarri recordó que la entidad estuvo al borde del abismo en el 2011 y el 2012, pero que actualmente es un banco «en una excelente posición desde el punto de vista de solidez y de rentabilidad», subrayando que el nuevo equipo gestor -que lidera el vasco- ha conseguido generar capital por importe de 5.500 millones de euros. «Hicimos un trabajo de gran profesionalidad y absoluta transparencia», aseguró, en referencia a la reestructuración ahora cuestionada. Pero Goirigolzarri no fue el único en referirse ayer a la polémica en torno a Bankia. La entidad tuvo su espacio de protagonismo durante la sesión de control del Congreso, ya que en respuesta a una pregunta del grupo socialista sobre el proceso de salida a Bolsa, el ministro de Economía, Luis de Guindos, acusó al Ejecutivo del PSOE de «forzar» voluntades y hacer que los supervisores -Banco de España y Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV)- «miraran hacia otro lado» en una operación que calificó de «error».
Búsqueda de transparencia
La creación de Bankia a partir de Caja Madrid y Bancaja, insistió el ministro, no se hubiera producido «sin el visto bueno del Banco de España y de la CNMV», por lo que si alguien busca transparencia lo más adecuado es que «empiece por preguntar a los responsables de esos organismos, ambos nombrados por el anterior gobierno», en el momento de la salida a Bolsa.
Por su parte, el fiscal del caso Bankia, Alejandro Luzón, aprovechó la Conferencia Anual de la Abogacía Española 2014, dedicada a Anticorrupción y Transparencia, para criticar la escasa disposición de los supervisores a facilitar la información que les reclaman. Aseguró que la dan «con cuentagotas» y reclamó mayor «implicación y compromiso».