Las diferencias en el seno de la OPEP llevan el petróleo a su precio más bajo en los últimos seis años

J. A. B. MADRID / COLPISA

ECONOMÍA

ALBERTO LÓPEZ

El barril de crudo tipo Brent (el referente en Europa) bajaba ayer de los 42 dólares por vez primera desde febrero del 2009

08 dic 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

La geopolítica hace extraños compañeros de viaje y, lo que es más raro, también en ocasiones beneficia al ciudadano común. Es lo que está pasando estos días con el petróleo, donde aunque lo esperable era que los países productores consensuasen medidas para apuntalar su coste -el más bajo de los últimos seis años-, las diferencias internas entre socios han provocado todo lo contrario.

El barril de crudo tipo Brent (el referente en Europa) bajaba ayer de los 42 dólares por vez primera desde febrero del 2009. En concreto, llegó a pagarse a 41,2 dólares, frente a los 44,82 con que cerró la semana pasada, una pérdida sensible para el poco tiempo transcurrido. Con el petróleo de clase Texas (el que prima en EE. UU.), la tendencia a la baja fue similar. El viernes terminó en 42 dólares el barril y ayer llegó a descender hasta los 37,65 para luego recuperarse levemente.

Los analistas creen que el llamado oro negro es ahora objeto de las apuestas a la baja de los especuladores, que juegan a su favor con la división interna de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP). Irán, Rusia y Venezuela, entre otros, quieren recortar la producción para subir precios, mientras Arabia Saudí (primer productor) y los emiratos prefieren mantenerlo. El crudo representa el 80 % de los ingresos estatales para los saudíes pero, puesto en la balanza el problema, prefieren sacar provecho de la debilidad actual de adversarios geopolíticos como Irá y Rusia. A diferencia de estos, el Estado árabe sí puede permitirse -incluso dos años seguidos, según varios expertos- un déficit público que se disparará este ejercicio al 25 % del PIB por el abaratamiento del petróleo en los últimos doce meses: un 40 % el Brent y hasta un 44 % el de tipo Texas.

Estados Unidos, tercer productor mundial, no está disconforme con la situación por la misma razón. Tampoco vería mal reducir la producción para subir precios, pero se arregla porque sus compañías petroleras han ajustado costes cargando el impacto a los proveedores de servicios. Según los expertos, antes necesitaban un mínimo de 75 dólares por barril para ser rentables; hoy les vale con 50 o incluso 45.

La cuota actual de producción de los doce socios de la OPEP es de 30 millones de barriles diarios. En septiembre, sin embargo, se produjeron 1,6 millones más y de octubre se presume algo parecido, lo que explica la nueva caída en un precio que se espera ronde los 50 dólares en el 2016 con una demanda baja.