Madrid impone a la banca una tasa por los cajeros que ya están cobrando concellos gallegos
ECONOMÍA
Con la medida pretende recaudar casi 750.000 euros al año
14 oct 2016 . Actualizado a las 11:34 h.El Ayuntamiento de Madrid también va a aprovechar la presencia de cajeros automáticos de la banca en la vía pública para aplicar una tasa con la que pretende recaudar casi 750.000 euros cada año. Lo hará a partir del 2017, si salen adelante los presupuestos de la capital, ya que la medida se recoge en la propuesta de ordenanzas fiscales presentada ayer por el responsable del Área Económica, Carlos Sánchez Mato.
Se trata de una nueva tasa por el uso de terminales de la banca «colocados en línea de fachada y a los que solo se tiene acceso directo desde la vía pública», según consta en la documentación. Sánchez Mato explicó que se trata de «una cantidad muy limitada» y que en ningún caso se debe interpretar como una medida de castigo a la banca. El impuesto se aplicará dependiendo del tipo de terminal de que se trate y del distrito o barrio de la ciudad donde se ubique. El importe podrá variar entre los 26 y los 742 euros por máquina al año. Solo en el primer ejercicio, Madrid prevé recaudar 745.405 euros.
En Galicia, hasta 3.000 euros
Madrid no es la primera ciudad que aplica este gravamen, aunque sí la más poblada entre todas las que ya la habían habilitado. Entre las grandes ciudades, destacan capitales como Barcelona, Las Palmas de Gran Canaria, Ciudad Real, Jaén, Teruel, Bilbao, Málaga, Murcia, Zaragoza, Valencia, o Sevilla. Por ejemplo, en la capital catalana se cobran entre 171 y 855 euros al año, dependiendo del tipo de terminal y de los centímetros de fachada que ocupe el mismo. Por su parte, en Las Palmas el importe varía entre los 26 y los 430 euros. En Bilbao, las cuotas se fijan en función de la categoría fiscal de la calle, de modo que la tasa anual oscila entre los 4,20 y los 126 euros. En Málaga, la cuota es fija, con 600 euros al año por cajero. La que más los grava es Zaragoza, donde el importe asciende a 2.235 euros.
En Galicia este gravamen a la banca se aplica en la mayoría de las grandes ciudades (A Coruña, Vigo, Pontevedra, Santiago, Ferrol o Lugo), así como en otros medianos como Lalín, Oleiros, Cambre o Viveiro -en este último se subió la tasa a 3.000 euros por cajero este año-. Aunque, como reconocen entidades consultadas, hay muchos concellos que sí recogen la tasa en sus ordenanzas, pero que en la práctica no la cobran nunca.