Reclaman un 30 % del valor del vehículo, según la gama, potencia y antigüedad. En toda España hay 500 personados
29 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Hasta 80 gallegos se han personado en el Juzgado Central número 2 de la Audiencia Nacional como acusación particular contra Volkswagen por el supuesto fraude en las emisiones contaminantes de algunos de sus modelos. Los demandantes gallegos son representados por el bufete Balms, con sede en Vigo, uno de los 17 despachos de España que está personado en la causa y el único de Galicia.
El número de demandantes gallegos va a aumentar porque el bufete tiene expedientes sin abrir y más interesados que han contactado. Los propietarios proceden de Negreira, Santiago, Ourense, Salceda, y las áreas de Vigo y A Coruña, entre otras zonas. Reclaman un 30 % del valor del vehículo, según la gama, potencia y antigüedad. En toda España hay 500 personados.
Una prueba que los demandantes presentarán es un informe de la policía judicial que revela que los coches que montan motor Volkswagen podrían triplicar el límite de emisiones permitido en Europa. Se basa en datos de la Autoridad Alemana de Homologación (KBA) y del laboratorio español Idiada.
Este informe podría ser útil para los demandantes gallegos porque podrán alegar y probar, según Balms, «un daño real y evaluable económicamente» y sostener «con peso y contundencia» su reclamación contra la multinacional.
La prueba que aportarán
Los autores del estudio analizaron un Seat Altea 1.6 TDC y un León 2.0 TDI que con el software activado arrojan 140 g/km, por debajo del límite de emisiones de NOX de 180. Pero sin el programa informático, el Seat Altea alcanzaría los 572 g/km y el Seat León, 362, «en niveles entre dos y tres veces superiores al máximo permitido por la ley europea», señalan fuentes de Balms. «El propio informe se sorprende de la enorme variación de datos y considera que los resultantes del análisis sin el software activado suponen y reflejan los valores reales de emisiones», dicen en el despacho vigués. «Este informe podría echar por tierra la defensa dela marca, que desde un principio ha sostenido que si bien las emisiones eran más elevadas que las declaradas, siempre estaban por debajo del límite de la UE», añaden.