Políticos de Ciudadanos abandonan la manifestación entre empujones y momentos de tensión

La Voz REDACCIÓN

ECONOMÍA

Luca Piergiovanni | Efe

La polémica vuelve a salpicar la marcha del 8M en Madrid

08 mar 2020 . Actualizado a las 19:20 h.

Espantando el miedo al coronavirus, miles de personas se concentraron en las calles de la capital para luchar por la igualdad. La protesta del 8M de Madrid arrancaba este domingo desde Atocha con miles de manifestantes bajo el lema de la cabecera: «Con derechos, sin barreras, feministas sin fronteras». Nada más empezar la marcha se pudieron escuchar las primeras proclamas, como «Madrid será la tumba del machismo», «queremos empleo, trabajo nos sobra», «no estamos todas, faltan las asesinadas» o «hasta los ovarios de trabajos precarios».

En la cabecera de la manifestación, ningún representante político, sino mujeres activistas, algunas de ellas mujeres con discapacidad. A la marcha, que partió de Atocha y terminará en la Plaza de España, acudió una gran representación del Ejecutivo, así como políticos de los principales partidos, a excepción de Vox. El Gobierno no tuvo pancarta propia, pero sí los partidos que lo integran: así, el lema del PSOE es «Mujeres libres, mujeres iguales» y el de Unidas Podemos, «Unidas, libres y feministas».

Pero una vez más, la polémica salpicó la jornada. La vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacis, de Ciudadanos, junto con otros miembros del partido naranja, entre los que se encontraban Edmundo Bal, César Zafra, Marcos de Quintos, Marta Rivera, Sara Jiménez o Miguel Gutiérrez abandonaron la manifestación en Madrid que conmemora el 8 de Marzo, Día Internacional de las Mujeres, después de que un grupo numeroso de mujeres, entre gritos y empujones, les increpara para que abandonasen la marcha. En ese momento, la Policía Nacional recomendó a los miembros de Ciudadanos que, por la seguridad, se marchasen de la manifestación.

De este modo, a la altura de la Plaza de Neptuno y al grito de «fuera fascistas de nuestros barrios», manifestantes empezaron a empujar a los representes del partido naranja consiguiendo, finalmente, que Ciudadanos abandonase la manifestación del día de la mujer.