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Este experto asegura que la factura de finales de año será muy parecida a la de mayo del 2021
26 dic 2022 . Actualizado a las 21:00 h.José Luis Sancha Gonzalo es experto en el sistema energético español y profesor en la Universidad de Comillas ICADE. Además, hace unos años escribió el libro Presume de entender (a fondo) las facturas de la luz y del gas.
—¿Qué balance hace del 2022?
—La guerra ha condicionado todo, el alza de los precios y la huida hacia adelante de los Gobiernos para tomar medidas, pero no acabamos de ver el final. Los precios siguen muy altos, pero gracias a todas las medidas que se han ido tomando la factura de finales de año será muy parecida a la de mayo del 2021, justo antes de que comenzase la crisis. Ya no se puede decir que sea cara.
—¿A qué atribuye esa bajada?
—Las medidas del Gobierno han contribuido muchísimo, sobre todo el tope al gas, que está funcionando muy bien, está reduciendo la factura de forma considerable. Desde el 15 de junio, el coste de la energía es un 15 % inferior al que hubiese sido sin esa medida y vamos a cerrar el año con 5.000 millones de menores ingresos para las tecnologías inframarginales (renovables, nuclear e hidráulicas). La única pega que veo es que las comercializadoras de mercado libre no están aplicando bien el tope al gas en las facturas eléctricas de sus clientes. Hay mucha desinformación, desconocimiento y desconfianza por parte de los consumidores, que ven que se les aplica una cosa que no tienen forma de calcular. Tampoco lo tenían previsto, porque contrataron un precio fijo y ahora pagan a mayores un ajuste variable tras renovaciones de sus contratos que realmente no lo son en algunos casos.
—El Gobierno va a cambiar la tarifa regulada, de modo que la referencia para fijar el precio de la electricidad no sea solamente el mercado diario. ¿Va a ser mejor o peor el cambio?
—Es una reforma que quiere reducir la volatilidad aplicando unas referencias de precios a futuros, y no solo horarios como ahora. Dará mayor solidez a la factura, pero hará que los precios del tramo horario punta se van a reducir y los valle van a aumentar. La curva se va a aplanar un poco, pero va a provocar un encarecimiento de la tarifa. El lado positivo es que habrá menos volatilidad, el consumidor vivirá algo más tranquilo aunque a la larga va a pagar un poco más.
—¿Tiene sentido todavía estar pendiente del reloj para consumir electricidad?
—Yo creo que es bueno, pero no para todos los consumidores. Hay muchas aplicaciones para ver qué horas son las más baratas del día, porque las hay a cuarenta céntimos y otras a dos. Las ocho, las nueve y las diez de la noche siguen siendo las horas punta y las de madrugada las baratas.