El mercado laboral frena en seco y el paro sube de nuevo de los tres millones
ECONOMÍA
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En otoño se destruyeron casi 82.000 empleos, de ellos 9.200 en Galicia, según la encuesta de población activa
26 ene 2023 . Actualizado a las 23:19 h.El mercado laboral, que resistió con fuerza frente a los embates de la pandemia, da muestras ya de agotamiento en un contexto económico de desaceleración agravado por la inflación y la subida de los tipos de interés. Así, entre octubre y diciembre se destruyeron en España 81.900 puestos de trabajo (9.200 de ellos en Galicia), según la encuesta de población activa (EPA) publicada ayer por el Instituto Nacional de Estadística.
Se trata del peor dato de un cuarto trimestre desde el 2013, cuando España aún no había salido de la crisis financiera desatada tras el pinchazo de la burbuja inmobiliaria. En unos meses, además, en los que se suele crear empleo por el tirón de la campaña navideña.
Pese al brusco frenazo del mercado laboral, el año cerró con un balance positivo en términos de creación de empleo. La ocupación creció en 278.900 personas en el conjunto del país (a razón de 764 nuevos puestos al día) y en 13.200 en Galicia.
La pérdida de empleo en otoño provocó un nuevo incremento del paro, con 43.800 desempleados más entre octubre y diciembre, lo que hace que el total se vuelva a situar por encima de la barrera de los tres millones: 3.024.000, con una tasa de paro del 12,87 %. Galicia se escapa de la tendencia general, con una bajada del desempleo en el último trimestre del año (3.400 parados menos que en verano y 3.700 en el conjunto del año).
Si el paro aumenta menos de lo que cae la ocupación es porque una parte de los trabajadores que perdieron el empleo no emprendieron la búsqueda de un nuevo puesto y abandonaron por tanto la población activa, que se redujo en 38.100 personas en el conjunto de España y en 12.700 en Galicia durante el último trimestre del año.
No son pocas, además, las voces que destacan las discrepancias que existen entre las cifras de la EPA y las de afiliación a la Seguridad Social y paro registrado, que el sindicato USO atribuye al bum de los fijos discontinuos. «La EPA siempre se ha considerado más fiable por reflejar de verdad la gente que no tiene trabajo, se registre o no en el SEPE. Y lo que está claro es que las personas que tengan contratos en vigor pero no estén trabajando, como ocurre con los fijos discontinuos, no se sienten activos porque la realidad es que no lo están. De ahí que esta EPA sea tan importante, ya que demuestra lo que el paro registrado oculta: hay menos empleo y peor», señaló el secretario general del sindicato, Joaquín Pérez.
Más funcionarios
Si en España todos los sectores crearon empleo salvo el primario, en Galicia la ocupación descendió en el 2022 en la industria (10.700 trabajadores menos) y en la construcción (1.300 bajas), mientras que creció en el campo y el mar (5.100 ocupados más) y el sector servicios (20.200).
La EPA muestra también cómo el frenazo del mercado laboral en el sector privado, donde la ocupación se redujo en 101.900 personas en el cuarto trimestre del año, fue compensado con un nuevo incremento del empleo público, ya que las distintas Administraciones aumentaron sus plantillas en 20.000 trabajadores en solo tres meses.
La sangría que no se detiene es la de los autónomos: el año cerró con 111.200 trabajadores por cuenta propia menos de los que había a finales del 2021, aunque en Galicia el desplome fue menos acusado: solo 300 bajas.
La cara positiva de la estadística es la mejora de la calidad del empleo en el primer año de la reforma laboral. Los cambios normativos provocaron que el empleo indefinido aumentara en casi 1,6 millones de personas, frente a un descenso de casi 1,2 millones en los temporales, lo que redujo la tasa de temporalidad más de siete puntos, hasta situarla unas centésimas por debajo del 18 %, su mínimo histórico.
Los hogares gallegos con todos sus miembros en paro aumentan en 1.500 en solo tres meses
La EPA refleja cómo el debilitamiento del mercado de trabajo tras el verano empeoró la situación económica de miles de familias gallegas, repuntando de nuevo la cifra de aquellas que tienen a todos sus miembros en edad y condiciones de trabajar en desempleo: crecen hasta las 52.300 (1.500 más que en verano y 1.400 más que al cierre del 2021). Con todo, también aumentan aquellas en las que todos sus miembros están ocupados, que se incrementan en 700 entre octubre y diciembre y en 6.000 en el conjunto del año, hasta rozar las 641.000.
La CEOE pide ayudas
Desde el Gobierno intentaron justificar el frenazo del mercado laboral en la segunda mitad del año argumentando que las empresas anticiparon la contratación de trabajadores a la primavera, justo tras la entrada en vigor de la última parte de la reforma laboral. El secretario de Estado de Economía, Gonzalo García, destacó también que la subida de los precios de la energía «claramente ha producido una moderación en el avance de la actividad».
Desde la patronal CEOE, por su parte, ponen el acento en el «estancamiento del empleo» en un contexto de «elevada incertidumbre, desaceleración de la actividad y riesgos a la baja», razón por la que han pedido «centrar los esfuerzos en priorizar el empleo sobre otros factores». Los sindicatos prefieren poner el foco en la mejora de «la calidad y la cantidad del empleo», como destacaron desde UGT, ya que además de reducirse la temporalidad aumenta también la proporción de contratos a tiempo completo.