El tráfico rodado y la calefacción pagarán por contaminar a partir del año 2027

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ, EFE

ECONOMÍA

Oscar Vázquez

El Consejo Europeo acuerda eliminar los derechos de emisión gratuitos a las empresas y gravar las importaciones de hierro, acero y aluminio

25 abr 2023 . Actualizado a las 19:07 h.

El Consejo Europeo adoptó este martes una serie de herramientas para encarecer las emisiones de dióxido de carbono en el bloque comunitario, así como una sistema para gravar las importaciones de hierro, acero, cemento, aluminio, fertilizantes, electricidad e hidrógeno.

Lo más novedoso de los textos aprobados es la creación del Mecanismo de Ajuste de Carbono en Frontera (CBAM, por su siglas en inglés), que busca que las compañías europeas que están sujetas a las normas climáticas del bloque y tienen que pagar por sus derechos de emisión de CO2 no estén en desventaja frente a sus rivales de terceros países en los que las exigencias climáticas son más laxas. Este gravamen se aplicará a partir del 1 de octubre del 2023 a las importaciones de sectores como la siderurgia, la producción de cemento o fertilizantes, el aluminio y la generación de electricidad.

Los importadores europeos de los productos afectados tendrán que obtener, primero, una autorización y, después, comprar los derechos de emisión de CO2 correspondientes al precio del carbono que se habría pagado si esos mismos bienes se hubiesen producido dentro de las fronteras del club comunitario.

Las exigencias se irán endureciendo gradualmente desde el 2026 al 2034.

Adiós a los derechos gratuitos

Este nuevo mecanismo está muy ligado a la ampliación del sistema de comercio de emisiones, el llamado ETS, que funciona desde el 2005 y pone precio al dióxido de carbono liberado por unas 11.000 instalaciones industriales intensivas en consumo de energía.

La nueva normativa mantendrá dentro del ámbito de ETS la aviación, incluirá el transporte marítimo pesado y reducirá gradualmente el volumen de derechos gratuitos para llegar a cero en el 2040 e incentivar así el cambio hacia tecnologías más limpias.

La revisión del sistema de emisiones incluye también la creación de un mercado paralelo, conocido como ETS 2, que gravará el CO2 de los carburantes empleados para el transporte rodado y la calefacción de los edificios a partir del 2027. Los ingresos generados por el ETS 2 se destinarán al Fondo Social del Clima, que tiene por objetivo aportar unos 86.000 millones de euros para ayudar a las familias vulnerables en la transición climática.