Se construirá un hotel de cinco estrellas y «tres exclusivos complejos turísticos»
17 sep 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Finales del mes de agosto y en la carretera que une Comporta con Tróia, un área envidiable y totalmente salvaje de Portugal, trabajan sin parar doce grandes grúas. Varios cientos de metros de terreno que de manera lineal se observan desde la carretera están totalmente vallados. Uno solo puede imaginarse lo que allí se va a construir. No hay ni un solo cartel que presuma de la iniciativa.
Preguntando, confirmamos que se trata del proyecto que lanzó en el país vecino Sandra Ortega, quien —hace ya siete años, en diciembre del 2016— compró a la empresa Sonae 340 hectáreas por 50 millones de euros. A partir de ahí, se unió al empresario portugués José Antonio Uva, que posee una participación minoritaria en el proyecto conocido como Na Praia. Para acometerlo se constituyó la empresa Ferrado Na Comporta I, II y III a través de las que se encauzan las distintas fases del proyecto turístico. «Se construirá un hotel y un resort», explica uno de los ingenieros responsables —que no el único profesional altamente cualificado— a la puerta de la obra, donde con una conversación escueta pero muy amable confirma algunos datos. «En estos momentos se están realizando labores de urbanización», que corren a cargo de la empresa Alves Riveiro, cuyo logotipo lleva el ingeniero grabado en la ropa de trabajo.
Al preguntarle a nuestro interlocutor, se desprende que la iniciativa es muy importante, tanto que son varias las empresas acometen el proyecto. En 98 hectáreas se hará un hotel de cinco estrellas y «tres exclusivos complejos turísticos» —posiblemente se tratará de una especie de agrupaciones de pequeños chalés—, acompañados por todo un complejo: spa, gimnasio, piscinas, pista de tenis y helipuerto. En total serán unas 504 camas, de las 3.242 aprobadas en los planes del ayuntamiento en el 2012, según publicó Tereixa Constenla en El País. ¿Por qué no se ha ejecutado todo lo permitido, incluido un campo de golf? No hay una explicación oficial, pero el proyecto, por ubicarse en una zona de alto valor ecológico, ha tenido contratiempos. El 23 de febrero se paralizó judicialmente tras una medida cautelar solicitada por el colectivo ecologista Dunas Livres. Solo dos meses más tarde la paralización se levantó, después de una resolución del alcalde de Grándola, Antonio Figueira Mendes, quien recordó que el proyecto fue calificado como de Potencial Interés Nacional, por ser «una pieza clave» en el desarrollo de la actividad turística y económica del litoral.
A simple vista, tras comprobar que el precio de las casas unifamiliares (todas ellas levantadas recientemente o en construcción) no baja del millón de euros (por el precio más bajo se podrían adquirir unos 300 metros cuadrados) y tras realizar una pequeña ruta por esta zona de Portugal, se constata que las autoridades lusas están dispuestas a desarrollar el área conocida como Costa Azul, de más de 40 kilómetros. No en vano, aquí se ha podido ver durante el verano a famosos y millonarios (se habla de Madonna, George Clooney, Vicky Martín Berrocal y Tamara Falcó, entre otros) que se cruzan en las calles de pueblos como Comporta con gente en su mayoría muy humilde, la única que vive en la zona todo el año. Dice alguna crónica que el helipuerto que se incluirá en el complejo turístico descrito ha sido bien valorado por las autoridades del país por cuanto desde él se podrán evacuar urgentemente a enfermos al hospital más cercano, que está a 50 kilómetros.