El mayor accionista de Trison negocia su venta a un fondo de Liechtenstein

La mayor parte del capital de Trison, la empresa gallega especializada en márketing digital y sensorial, está a punto de cambiar de manos. La gestora de fondos Portobello Capital planifica desde hace varios meses desprenderse de su participación en varias empresas españolas, entre ellas la fundada por Carlos Saavedra, para disponer de reservas suficientes con las que lanzar un nuevo fondo de capital riesgo. Para ello, necesita desinvertir y volver al mercado con los procesos de venta de Sabater, el fabricante español de pimentón y otras especias; y Trison, el histórico proveedor de Inditex. Entre los dos, según las informaciones que manejan distintos analistas, Portobello prevé ingresar unos 500 millones de euros. Casi la mitad, unos 200, procederían del cambio de manos de la compañía con sede en el municipio coruñés de Sada.

La operación —que dirige el banco de inversión Canaccord— no está cerrada, pero sí muy avanzada, reconocieron distintas fuentes conocedoras de las negociaciones. Lo que se ha suscrito es un principio de acuerdo con L-GAM, la gestora de capital riesgo participada por la familia real de Liechtenstein, para traspasarle Trison.

Sin duda, si finalmente el acuerdo se materializa, se produce en uno de los momentos de mayor solidez de la compañía gallega, lo que facilita a Portobello el proceso de desinversión. Y es que la firma prevé alcanzar este año una cifra de negocio próxima a los cien millones de euros y unas ganancias de más de 15 millones. Unos resultados que, tal y como reconocieron fuentes de la compañía en su momento, proceden del estirón que le ha proporcionado su incursión en el segmento de la automoción, mediante la digitalización de los concesionarios de coches, desde los de enseñas de lujo como Porsche, Rolls Royce o Mercedes, hasta la totalidad de la red de centros de venta por todo el mundo de Toyota Motor Corporation. Un segmento que ha contribuido a diversificar su cartera, pero siempre teniendo muy presente su cliente de toda la vida, Inditex, con quien mantiene un vínculo consolidado para todas sus marcas en materia de equipamientos sensoriales y audiovisuales.

Respecto a lo que supondría tener como nuevo socio al fondo de capital riesgo de Liechtenstein, fuentes próximas al fabricante gallego reconocieron que no supondría un cambio sustancial en la dirección y en los planes de una compañía que ha ido creciendo hasta convertirse en líder de su segmento. Más bien al contrario. Se interpreta como un movimiento que permitirá no solo a Trison hacerse todavía más internacional, sino que forma parte de las estrategias de mercado de este tipo de gestoras. Suelen invertir en una compañía durante un período de tiempo, habitualmente en torno a cinco años, y cuando las empresas han alcanzado la madurez necesaria con un valor generado lo suficientemente atractivo salen del capital.

Es el caso también de L-GAM. Se trata de una gestora de capital de las más jóvenes de Europa, creada hace aproximadamente una década en el Principado de Liechtenstein con directivos de la industria de fondos de conocidas firmas y de la propia familia real del pequeño territorio ubicado entre Suiza y Austria, considerado un paraíso fiscal. 

El dueño de Roberto Cavalli

Entre las adquisiciones realizadas por L-GAM y que han tenido mayor impacto mediático han sido la de incorporar a su cartera a la firma de lujo italiana Roberto Cavalli. El mayor mercado participativo del fondo se encuentra en Italia y en Francia, al que se incorporaría España si finalmente se acuerda el traspaso y se hace cargo del 70 % de las acciones de Trison ahora en manos de Portobello Capita (el 30 % restante sigue estando controlado por su fundador y segundo accionista).

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