El BNG avanza «unha ofensiva» contra Altri y califica la fábrica de «bomba ambiental que non queren en Portugal»

Manuel Varela Fariña
M. Varela SANTIAGO / LA VOZ

ECONOMÍA

XOÁN REY | EFE

Los nacionalistas habían apoyado dos iniciativas al final de la legislatura para la creación de la planta, pero advierten ahora de que el proyecto «nada ten que ver co que se anunciou»

21 mar 2024 . Actualizado a las 14:05 h.

El BNG llegó a apoyar al final de la última legislatura dos iniciativas del PP en el Parlamento a favor de garantizar inversiones para la industria textil, dirigidas específicamente a la instalación de Altri en Palas de Rei. Pero esa posición ha cambiado tras analizar la documentación del proyecto, en exposición pública desde principios de mes. Lo avanzó la propia cuenta de los nacionalistas en la red X, y lo argumentó esta mañana la viceportavoz Olalla Rodil en el Parlamento: «Estamos diante dunha gran mentira que nada ten que ver co que se anunciou». 

La diputada explicó que la multinacional portuguesa Altri no pretende instalar una fábrica de fibras textiles en Palas de Rei, «como aínda intenta facer crer o Partido Popular», sino una de celulosa líquida que será tres veces más grande que la de Ence en Lourizán. Unas dimensiones que permitirían a la instalación crear 250.000 toneladas de celulosa en una primera fase, que aumentarían a 400.000 en la segunda. «Neste proxecto non hai nada de economía circular nin se pretende pechar ningún ciclo produtivo no noso país, senón xerar materia primaria para transformar noutros lugares», continuó Rodil. Según consta en el estudio de impacto ambiental, la factoría tendrá capacidad para producir 400.000 toneladas al año de celulosa soluble y otras 200.000 de fibra textil (lyocell).

Para la diputada, el proyecto supone un «exemplo de libro» de industria de enclave. Y lo sostiene en la documentación aportada por la propia Altri, que en su estudio de impacto admite que se trata de una industria de estas características. La definición de este tipo de modelo productivo es el de una economía que se diferencia del resto de empresas que integran la zona, y que la bibliografía suele enmarcar en zonas subdesarrolladas, pero que Altri considera que constituirá un polo de atracción para otras compañías «creando sinergias» con las ya existentes en su entorno.

Los nacionalistas consideran que se trata de «unha fábrica contaminante que non queren en Portugal», y que supone una «bomba ambiental no corazón de Galiza». Rodil señaló que la construcción de la factoría causará «enorme prexuizo a toda a bacía do río Ulla», y que no solo afectará a Palas de Rei, sino también a otros concellos como Agolada, Santiso y Melide y a la ría de Arousa, donde desemboca el Ulla. También lamentó que las 360 hectáreas sobre las que se asienta Altri tienen un «enorme valor patrimonial y natural».

«Hipoteca o futuro do país», denunció la viceportavoz nacionalista, quien acusó a los populares de trabajar «única e exlusivamente» para «beneficiar ás empresas amigas» y colocar una «alfombra vermella para que arrasen o monte, o río e a terra».

«Ofensiva» del Bloque

Con todos estos elementos, Rodil subrayó que el BNG no apoyará la creación de este proyecto en Palas de Rei y avanzó el inicio de «unha ofensiva na defensa da terra, do Ulla, da ría de Arousa e deste país». Los nacionalistas presentarán alegaciones al proyecto hasta el 17 de abril, fecha en la que finaliza el período, y avanza mociones en los ayuntamientos, iniciativas en el Parlamento gallego en cuanto se inicie el período de sesiones de la nueva legislatura, y también en el Congreso, Senado y Parlamento Europeo. 

La diputada también dijo que su organización se pondrá «ao servizo da veciñanza» para asesorarles y presentando alternativas «a esta rapiña e a este modelo». «Estamos convencidas de que imos parar esta bomba medioambiental», subrayó.

Posición crítica con Ence

Los nacionalistas también han mostrado siempre su rechazo a la planta de Ence en la ría de Pontevedra. En febrero del año pasado, el Tribunal Supremo avaló la prórroga concedida a la fábarica para permanecer en su ubicación en terrenos de Costas hasta el año 2073, tras años de recursos judiciales planteados, entre otros, por el gobierno local de BNG en la ciudad. La portavoz nacional del Bloque, Ana Pontón, expresó tras la sentencia que su organización agotará «todas as vías políticas e xudiciais» para sacar a Ence de la ría de Pontevedra.

El alcalde Miguel Anxo Fernández Lores mantiene su férreo rechazo a la permanencia de la planta desde que tomó posesión, en 1999, y apela continuamente a la necesidad de recuperar la ría y regenerar ambientalmente los terrenos que ocupa la industria pastera, lo que ha supuesto, al mismo tiempo, el rechazo de los trabajadores y empresas auxiliares de la pastera.