Grifols se desmorona un 12 % en Bolsa ante las nuevas alertas por su abultada deuda

C. Alba MADRID / COLPISA

ECONOMÍA

Altea Tejido | EFE

Moody's rebajó la calificación de la empresa

27 jun 2024 . Actualizado a las 18:17 h.

Grifols es incapaz de despertar de su pesadilla bursátil. A pesar de que la compañía ha llevado a cabo notables esfuerzos en las últimas semanas para recuperar el favor de los inversores, su cotización sigue siendo presa de la volatilidad, con un desplome del 12 % en la sesión de ayer, lo que dejó sus títulos en 7,9 euros. A punto de cerrar el primer semestre del año, la compañía ha perdido un 45 % de su valor.

Detrás de la caída de este jueves se encuentra un nuevo toque de atención por parte de la agencia de calificación Moody's, que advirtió del elevado endeudamiento de la empresa, incluso después de haber cerrado la venta del 20 % de Shanghai RAAS por 1.600 millones de euros. Dinero que se destinará, precisamente, a reducir deuda.

Pese a ello, las dudas siguen planeando sobre la compañía, mucho más después de que un grupo de bancos hayan mostrado sus reticencias, según adelantó El Confidencial y confirman fuentes financieras, a refinanciar parte de un crédito que vence esta misma semana de la sociedad Scranton, bajo el foco del mercado por su papel como brazo inversor de la familia fundadora.

Al margen de estos problemas, los elevados niveles de endeudamiento son los que más preocupan a las agencias de rating. Y Moody's no ha dudado en recortar la nota de la compañía de, advirtiendo también de una posición de caja «débil», junto a un apalancamiento de 6,8 veces el ebitda (resultados antes de intereses, impuestos, depreciaciones y amortizaciones).

Esta rebaja supone un duro revés para Grifols, pues las notas de estas agencias de calificación son vitales para que las empresas puedan emitir deuda en el mercado para financiarse. Además de sus riesgos financieros, Moody's también advierte que Grifols cuenta con una gobernanza corporativa «con una estructura organizativa compleja y opaca». Y destaca de nuevo la relación y las operaciones vinculadas entre la compañía y las sociedades Scranton, Haema y BPC, también señaladas por Gotham City Research en el informe que a principios de año puso en la diana a la empresa, a quien el fondo acusó de maquillar cuentas para ocultar deuda.

En este entorno —y aunque otra de las agencias líderes, Fitch, ha decidido mantener la nota de Grifols— los inversores han dejado claro que prefieren no asumir más riesgo.