La escuela gallega que pasó de un piso de 30 metros a levantar 5,5 millones de un gran fondo de inversión: «La formación cambia vidas»
ECONOMÍA
Hack a Boss, reconocida por sus «bootcamps» de programación, cambia de nivel. Tras ocho años de aventura consolida su negocio y abre una etapa de expansión de la mano de Axon. En el punto de mira, la formación continua para las empresas
31 oct 2024 . Actualizado a las 10:13 h.En la sede central de Hack a Boss en un histórico edificio del centro de A Coruña solo se respira emoción. Su historia se parece a la de esas empresas que pasan de un garaje a Silicon Valley. En este caso, en apenas seis años han pasado de un piso de 30 metros cuadrados a levantar 5,5 millones de euros de uno de los grandes fondos de inversión nacionales. El dueño de aquel piso es Pablo Rodríguez, fundador de la escuela y ahora director de Negocio y Producto de esta start-up gallega. «Ha sido durísimo», explica sobre un proceso de negociación que acabó bien, pero que supuso paralizar la empresa prácticamente seis meses.
Nuevo capital
Su inversor es Axon Partners Group, uno de los grandes motores de las compañías de tecnología e innovación.
La fórmula de esta escuela ya sorprendió en un momento en el que se ponían en cuestión los bootcamps. La empresa se dio a conocer, entre otras cosas, por enseñar a personas sin una formación específica a programar en apenas 16 semanas. Su negocio funcionó y suman ya más de 2.000 alumnos. Una masa que se ha incorporado a algunos de los puestos más demandados por las compañías tecnológicas, como el Desarrollo Web, Data Analytics y Science & AI. Después llegaron las formaciones con otro tipo de empleo asegurado de la mano de empresas como NTT Data. Grandes empresas que seleccionaron a su talento directamente estas aulas gallegas.
Ahora entran en una nueva fase. Con esos 5,5 millones llega el crecimiento y la expansión. Hacer llegar a más personas su oferta formativa y consolidarse como líder en el sector de la formación tech en España. Por el momento presumen ya de nueva criatura: su Boost Academy. Se trata de un programa dirigido a grandes empresas, que hace hincapié en la formación continua a través de una plataforma de e-learning propia. Son clases en directo, que ofrecen a las organizaciones la posibilidad de capacitar a sus equipos de forma constante.
Todo esto lo hacen con un cambio de líder. Pablo Rodríguez dejaba de ser el CEO en mayo para pasarle el bastón de mano a Vicente Muñoz, que asume el reto tras una trayectoria de 23 años en Telefónica, entre otras experiencias. «Donde hay un lío ahí me meto. Dice mucho de cómo es Pablo que haya confiado en mí para esta etapa», explica este profesional extremeño muy vinculado a Galicia. «El partido empieza ahora. Es ilusionante levar a la empresa al siguiente nivel. El sector no puede ser más atractivo: ayudar a las personas y empresas a capacitarse. No hay nada más relevante: la formación cambia vidas. Al final en Europa estamos muy encorsetados con las enseñanzas regladas. Nuestra responsabilidad es darle a los alumnos la máxima calidad y a las empresas la posibilidad de capacitar a su talento. No hay empresa ni entorno tecnológico que no empiece por las personas», asegura insistiendo en ese nuevo punto de mira de la compañía. Muñoz, que conocía a Pablo Rodríguez en noviembre del 2023 enseguida conectó con el proyecto y la filosofía de la empresa. Precisamente en su currículo está el trabajo con start-ups. «Este tipo de aventuras tienen cosas buenas y malas, pero cuando me voy de un sitio me gusta ver qué he creado, en qué he contribuido».
Para Rodríguez, que adopta un nuevo rol en la compañía. «Con la incorporación de Vicente como CEO y el apoyo financiero de un fondo especializado en Growth Tech como Axon, confiamos en reforzar nuestro liderazgo en la formación tecnológica a nivel nacional, crecer en otras áreas y seguir lanzando al mercado productos para las empresas tan innovadores tecnológicamente como nuestra plataforma de reclutamiento tecnológico basada en IA o nuestro ecosistema de formación tecnológica en directo, la Boost Academy», remarca.
Que un emprendedor se aparte del puesto de CEO no es precisamente habitual, pero Pablo Rodríguez lo resume de forma sencilla. «Diría que en este mundo hay poca humildad. Si hay alguien mejor que tú tienes que ponerlo. Mi equipo y yo conocimos a Vicente y nos dimos cuenta de que estaba más capacitado».