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Sabadell reclama al Gobierno «que sea claro» sobre si impedirá una fusión que «pone en peligro el bienestar» de España

Ana Balseiro
Ana Balseiro BARCELONA | LA VOZ

ECONOMÍA

El banco alerta de los riesgos de la operación, que produciría un daño irreparable a las pymes

20 mar 2025 . Actualizado a las 09:48 h.

«Creemos en un proyecto en solitario». El presidente del Banco Sabadell, Josep Oliu, y su consejero delegado, César González-Bueno, no se mueven ni un milímetro del mensaje que mantienen desde hace casi un año ante la pretensión de BBVA de hacerse con la entidad a través de una insólita opa hostil. Volvieron a insistir en ello la víspera de la celebración de la junta general de accionistas, que tendrá lugar esta tarde en Sabadell, de vuelta a su sede histórica ocho años después de trasladarse a Alicante en el 2027 por la deriva independentista. Sin embargo, pese a que el banco insiste en seguir en solitario como mejor modo de dar rentabilidad a sus inversores y servicio a sus clientes -especialmente a las pymes, que son la joya de la corona de su negocio-, el mensaje de las últimas horas parece dar por hecho que Competencia dará luz verde a la opa sin imponer condiciones «duras» a BBVA.

Así lo admitió González-Bueno ayer en Londres, durante su intervención en la conferencia financiera organizada por Morgan Stanley. Por eso ahora los catalanes ponen sus esperanzas en el Gobierno para que el Ejecutivo frustre la fusión, aunque se tramite la opa, Y por primera vez le piden que «sea claro» sobre sus intenciones sobre la operación. Porque es el Ministerio de Economía el que, una vez culminada la fase 2 del proceso (algo que se espera de forma casi inminente), tiene la última palabra sobre la operación, una vez que la CNMV certifique que el folleto de la operación es correcto. Oliu y su mano derecha entienden que el Ejecutivo tiene argumentos sobrados para hacerlo -le recuerdan que «puede imponer las condiciones que quiera», ya que creen que los de Carlos Torres ni desistirán de la opa ni mejorarán su precio. 

«Esta es una operación que pone en peligro el bienestar en España, porque afecta al 70 % del tejido industrial y productivo, que son las pymes, y lo hace de una forma que no es reparable, ya que una vez que desapareciese esa competencia no se puede recuperar, y esa es una responsabilidad que requiere una reflexión», señaló el consejero delegado.

No es el único aspecto al que se refirió ayer durante un encuentro con periodistas, ya que volvió a insistir en que los accionistas de ambos bancos «tienen mejor futuro» si continuan en solitario, pues «la operación ha descarrilado hace tiempo». Al respecto, recordó que primero había surgido como «una operación amistosa, luego como una opa que iba a provocar una fusión prácticamente inmediata, con unas sinergias muy importantes, y ahora nos encontramos en una situación en la que el consumo de capital es mucho mayor, en la que hasta el BBVA reconoce que la fusión no es el escenario central y que dichas sinergias no se van a producir». Por todo ello, entiende que los accionistas de Sabadell tendrán mejores dividendos sin integración: «No solo en el 2024, con unos diividendos apoteósicos, históricos, sino de forma recurrente».

«Velar» por el sistema financiero

De este modo, resumió que la fusión «no es buena para España, no es buena para las pymes y no es buena para los accionistas». El presidente reforzó los argumentos de su mano derecha recordando que el Gobierno tiene que velar por el futuro de España y el banco por el de sus accionistas, por lo que pidió «la máxima transparencia» para que el folleto les asegure toda la información precisa sobre las consecuencias de la operación en cualquier escenario.

«El Gobierno debe valorar si ésta es una operación que le conviene o no al país, porque tiene que velar por el sistema financiero. En la decisión que debe adoptar el Gobierno debe ser muy claro a la hora de determinar si va a permitir o no la fusión», insistió Oliu, emplazando por primera vez al Ejecutivo a aclarar cuál será su postura.

Sobre la posibilidad de que BBVA mejore una oferta que la evolución de la cotización ya ha batido, el presidente de Sabadell ha advertido de que, aunque finalmente ocurriese -como se espera-, dicho movimiento tendría también efectos negativos: «El aumento en la oferta y con ello el mayor consumo de capital puede verse contrarrestado por una depreciación del valor de las acciones de BBVA, lo cual sería malo si se produce el canje». Por contra -insistió Oliu- si la opa fracasase «al día siguiente tendremos una inyección de optimismo y eso se verá en nuestra red comercial. Si ahora vamos bien entonces iremos mejor».

Sobre el rumor de que los grandes inversores -fondos internacionales como BlackRock- estarían a favor de la opa, el presidente señaló que «no tienen una posición tomada ni la tendrán hasta el ultimo momento».En lo que sí mostró su confianza es en el respaldo de los pequeños accionistas a que el banco continue en solitario: «Ellos son el más duro de los núcleos duros que puede tener un banco».