El sector anticipa «graves» efectos en la financiación de familias y empresas
03 jun 2025 . Actualizado a las 17:57 h.El sector bancario ha decidido emprender acciones legales contra el impuesto especial a la banca que introdujo el Gobierno en el 2022 y que decidió mantener de forma indefinida el pasado mes de noviembre.
Según explican las patronales AEB y CECA en un comunicado conjunto remitido este martes, sus socios han presentado un recurso contencioso-administrativo contra la Orden Ministerial que aprueba el modelo de autoliquidación y pago fraccionado de este gravamen (Orden HAC/532/2025).
Las asociaciones bancarias no solo alertan de los «graves» efectos económicos que tendrá sobre la financiación de familias, empresas y la economía en su conjunto, también denuncian que este impuesto deja a los bancos españoles en una situación de «merma competitiva» respecto al resto de entidades bancarias europeas, toda vez que este tipo de gravamen, aseguran, no existe en el resto de la eurozona.
Las patronales recuerdan que el Banco Central Europeo (BCE) ya se pronunció en contra de este impuesto el pasado mes de diciembre. El organismo con sede en Fráncfort considera que puede tener efectos adversos, ya que podría limitar la capacidad de los bancos de conceder créditos y de ofrecer condiciones de préstamo más favorables. Además, su vigencia podría acarrear «consecuencias imprevistas para la solvencia y la competitividad de las entidades de crédito», concluía el supervisor.
También el Banco de España ha manifestado sus dudas en torno al gravamen. Lo hizo en su Informe de Estabilidad Financiera de Primavera. Y es que, al margen de su potencial para obstaculizar la concesión de préstamos, el impuesto especial a la banca «puede dar lugar a la fragmentación del sistema financiero europeo».
También organismos internacionales como el Fondo Monetario Internacional (FMI) han cuestionado la continuidad del impuesto. En un informe reciente recomienda al Gobierno español a repensar el gravamen.