Un total de 92 alumnos ingresaron ayer en la Escuela Naval, en un curso que pasará a la historia como el primero con un título de grado en el plan de estudios
02 sep 2010 . Actualizado a las 02:00 h.Nuevos alumnos para un nuevo modelo de carrera militar en la Escuela Naval de Marín. Los aspirantes de Primero, que ayer ingresaron en la institución castrense, serán la promoción que inaugurará la aplicación conjunta de la formación propiamente militar con otra titulación de grado. La decisión de las autoridades competentes en el caso para Marín es una titulación de la Universidad de Vigo, Ingeniería Mecánica. Cuando dentro de cinco años la promoción actual se licencie y reciba sus despachos como oficiales de la Armada, los alumnos también se habrán graduado como ingenieros universitarios.
Esta es una de las novedades de este curso, aunque hay algunas más destacando la modificación del sistema de acceso. Se ha suprimido el acceso por oposiciones, y en su lugar se aplicará la nota de corte de selectividad. Además, los aspirantes han tenido que pasar con éxito unas duras pruebas físicas, un examen psicotécnico y un ejercicio de inglés. Para este año, la nota de corte fijada es de 8,4 sobre doce.
Bienvenida oficial
Los cambios en el plan de estudios y el sistema de acceso tendrán como repercusión el incremento pausado del número de alumnos en el centro castrense, según la oferta aprobada por Defensa. Ayer entraron los aspirantes pertenecientes a los cuerpos General y de Infantería de Marina. Sus padres, familiares y amigos acudieron a despedirles a la puerta de Carlos I, desde donde se fueron leyendo los nombres de los aspirantes, que formaron el batallón a la entrada.
Los alumnos proceden de toda España y muchos, como el gaditano Santiago González, pertenecen a una estirpe de marinos. González resaltó que él se sentía atraído por la vida militar porque era un ambiente que le gustaba desde niño. No es el único en apelar a estas razones. A su lado, otro compañero, el madrileño Sergio de la Mota, añadió que sabía que los primeros días serían difíciles, pero que creía que sería posible superarlos.
A todos ellos, el director, Marcial Gamboa, les recibió personalmente, los saludó uno a uno en la formación y les animó a esforzarse para pasar con éxito los retos que tienen por delante. Después, los nuevos alumnos marcharon hasta el interior del recinto donde comenzaron la adaptación a su vida militar.