La euforia de Feijoo y la losa del pacto en Valencia con Vox

ELECCIONES 23J

Santi Otero | EFE

14 jul 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Mal día en la oficina para el PP y Génova. Demasiado euforia entre los populares con el éxito del debate, tanta que parece que se sigue celebrando cada noche. Tienen que pasar página y la forma de pasarla no es sembrar la desconfianza sobre el voto por correo. En la calle, algunos dicen que el récord del voto por correo se debe a la movilización de la derecha, que gozan de la propiedad de segundas viviendas y que no estarán en casa en una fecha como el 23J. Pero no hay que descartar que el bum de las colas en las oficinas de Correos también tenga que ver con una posible reactivación de la izquierda, en la que está calando cada vez más el miedo a la involución de un pacto con Vox. Ayer fue un mal día para Génova por el mensaje confuso sobre el voto por correo, que Feijoo se apresuró a corregir en su visita a Jiménez Losantos. Pero sobre todo por el pacto con Vox en Valencia. La alianza ha supuesto una losa para las aspiraciones del candidato, que por el momento solo va ganando en las encuestas.

Las victorias en Galicia no son modelo de nada. Si alguien debe conocer la diferencia entre las mayorías absolutas gallegas y a lo que ahora se enfrenta Feijoo es su equipo, que sigue formado por un núcleo duro en el que hay paisanos. La campaña de unas generales es otra cosa, caza mayor. Haría muy mal en eternizarse con su victoria en el debate. Entre algunos populares parece que sigue ganando cada noche, que el debate es infinito y se celebra sin parar. Feijoo no ha ganado nada en su camino hacia la Moncloa. Solo va por delante en las encuestas, que no sirven para gobernar. Génova debe frenar la euforia y dejar de escuchar a los corifeos de su banda.

La difícil digestión del pacto de Mazón con Vox. El líder del PP en Valencia fue el más rápido en suscribir la alianza con Vox. Ayer se visualizó ese acuerdo y Abascal sacó pecho, algo que daña el perfil centrista que quiere marcar Feijoo. El líder de Vox dice que entrar o no en el Gobierno de España dependerá del porcentaje de voto que logre su partido, si salen los números para gobernar de la mano del PP. En las generales de abril del 2019, lograron un 10 % del voto. En las de noviembre del 19, se fueron a un 15 %. Vox en Murcia exige entrar con un 18 %. En Valencia lo ha conseguido con un 12 %. Difícil de explicar para Feijoo. Todo ese voto socialista que dicen las encuestas que se está llevando puede volar si el escenario final va a ser similar al de Valencia. Enric Juliana lo explica en La Vanguardia: «El PP y Vox oficializaron su matrimonio en Valencia, principal escaparate de los cambios que están teniendo lugar en la política española». El país mirará hasta el 23J a las primeras decisiones de Mazón con Vox sobre igualdad y otros derechos.

La silla vacía de Javier Arenas. Falta mucho, pero en el horizonte al PP se le aproxima otra borrasca. Si Abascal decide ir al debate a TVE con Sánchez y Yolanda Díaz, se visualizará la silla vacía de Feijoo. ¿Recuerdan la silla vacía cuando Javier Arenas fue el candidato? El PP no hará más debates, pero esa imagen puede pasar factura. Lo lógico es que Abascal cambie de idea y no vaya a inmolarse a ese encuentro televiso como rehusó al final participar con ese formato en el que le planteó el grupo Prisa, que se suspendió. Lo escrito, ganar encuestas no es igual a ganar elecciones. Queda mucho partido.