Xavier Vence se declaró enemigo de los recortes y de la corrupción y prometió eliminar estas prácticas
23 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.El líder del BNG, Xavier Vence, cerró anoche la campaña en el feudo de Caballero y sin duda por ello aludió a los «discursos histriónicos que apelan aos baixos instintos, pero hai outras vías», singularmente las que defiende el BNG «para construír un novo país dende os concellos». Pese a este aguijonazo al alcalde socialista, el grueso de sus disparos se dirigieron al PP («hooligan dos recortes») y a Feijoo como su máximo dirigente en Galicia.
Está convencido de que el presidente de la Xunta «sabe ben que a xente xa non traga e por iso vai dando tumbos polo país adiante pronunciando discursos delirantes. Un día ataca ao BNG e outro a Podemos pese a que non hai candidatura de Podemos». Por esta vía trató de eliminar un competidor al que todos a la izquierda del PSOE temen, buscando situarse en una posición similar a la del partido de Iglesias: «Somos incómodos, por eso nos atacan», clamó.
En esta línea, se declaró enemigo de los recortes y de la corrupción y prometió eliminar estas prácticas. «Demostramos onde gobernamos que podemos facelo, e despois do 24 farémolo en máis sitios».
Para ello definió las candidaturas del Bloque como «serias, a diferenza doutras que proliferan. Nós temos un modelo de cidade aí onde gobernamos» y no dudó en poner como ejemplo el caso de Pontevedra, regida por el nacionalista Fernández Lores desde hace casi dos décadas.
De tener éxito el BNG este domingo, anunció Vence la puesta en marcha de una «rede de concellos nacionalistas libres de desafiuzamentos, de pobreza enerxética e social, de corrupción e dinamizadores da economía».
Antes de abandonar el estrado equilibró las críticas al PP con alguna mención más al caso de Vigo, aclarando que «non se desenvolve un concello dando puñetazos contra todos, senón deseñando unha política para Galicia enteira».
No obstante, fue el candidato a la alcaldía viguesa, el exsindicalista de la CIG Serafín Otero, el encargado de marcar el territorio al socialista Caballero, con quien su partido gobernó en coalición hasta el 2011. «Merecémonos un goberno onde non haxa ningún concelleiro imputado por facer negocio co formigón no Concello», caso del edil Ángel Rivas, número 9 en la lista del PSOE. Mencionó también la operación Patos, por la que fue registrado el Concello. Acto seguido se preguntó qué hará el BNG el día 25, concluyendo que «non permitirá gobernar como dereita disfrazado de esquerda» al PSOE, sin cerrar la puerta a un nuevo pacto.