Denuncia que ha sufrido una «cacería política» desde su propio partido, mientras la Ejecutiva Federal destaca su «valentía y firmeza» El ex-secretario general del Partido Socialista de Euskadi (PSE), Nicolás Redondo Terreros, anunció ayer su renuncia a competir por la reelección en el cargo en el congreso extraordinario que se celebrará el mes de marzo y que él mismo forzó con su dimisión. Redondo atribuyó su decisión a las «presiones» y a la «cacería política» desatada en su contra en el seno del propio partido socialista. El último episodio de esa supuesta persecución ha sido la filtración de una reciente reunión con el ex-dirigente socialista condenado por los GAL Ricardo García Damborenea. Un encuentro que Redondo Terreros desmintió ayer.
19 ene 2002 . Actualizado a las 06:00 h.Aunque el ex-líder de los socialistas vascos admitió haber «perdido la batalla de las personas», se mostró sin embargo satisfecho por haber ganado el «debate de las ideas», ya que el documento redactado por la gestora del PSE para debatir en el congreso recoge gran parte de sus aportaciones. Su marcha fue acogida con respeto por la totalidad de familias que cohabitan en el socialismo vasco. Nicolás Redondo, que forzó la crisis del PSE con su abandono de la secretaría general el pasado diciembre, escogió la agrupación socialista a la que pertenece como afiliado, la de la localidad vizcaína de Portugalete, para anunciar su renuncia irrevocable. Consciente de los numerosos apoyos con los que contaba para optar a la reelección, a la hora de las justificaciones denunció «las presiones» y «la cacería política» a la que ha sido sometido en su formación por su defensa de la «la libertad, la Constitución y el Estatuto», por coincidir en este aspecto con el Partido Popular y por negarse a «colaborar con el nacionalismo gobernante». También relacionó su marcha con las filtraciones interesadas sobre encuentros con el presidente José María Aznar o con el ex-secretario general del PSE en Vizcaya, Ricardo García Damborenea. «Resistir o abandonar» Ante esta situación, señaló que tenía dos opciones: «Resistir o abandonar». Aunque aseguró que «personalmente podía resistir», aclaró que no está dispuesto a «someter a este estrés al partido donde he nacido y donde seguiré militando». «No estoy dispuesto a someter, por mi culpa o por la de los que hacen la cacería, a este partido a tanta presión. No estoy dispuesto, tal vez otros sí, a argentinizar al PSE». La Ejecutiva Federal del PSOE expresó su «respeto» por la decisión de Nicolás Redondo Terreros y exaltó su «valentía y firmeza» en la defensa de sus principios y de los valores democráticos. El secretario de Organización, José Blanco, confió en que Redondo siga contribuyendo al debate abierto en el seno de los socialistas vascos para conseguir la «máxima integración» de todos los sectores y mantenga su cargo de responsable de la secretaría federal de Relaciones Institucionales. Esta vez sí avisó Redondo a José Luis Rodríguez Zapatero de su decisión, y horas antes de hacerla pública comunicó por teléfono al líder del PSOE que iba a anunciar su renuncia a presentarse como candidato a la secretaría general del PSE en el Congreso extraordinario del próximo mes de marzo. La víspera ya había hablado con el responsable de Organización del partido, José Blanco, para adelantarle que había cerrado su reflexión.