El Ayuntamiento activa hoy la mayor consulta ciudadana por internet

Paloma Abejón MADRID

ESPAÑA

Los habitantes del centro podrán decidir sobre las prioridades para mejorar su distrito Está previsto que participen un total de 136.000 madrileños mayores de 16 años

27 jun 2004 . Actualizado a las 07:00 h.

Un total de 136.000 madrileños mayores de 16 años y residentes en el distrito de Centro podrán concurrir desde hoy y hasta el miércoles en el proceso de votación del proyecto Madrid participa, una experiencia piloto de participación ciudadana a través de las nuevas tecnologías de la información organizada por el Ayuntamiento de Madrid que permitirá estudiar la validez de los modernos medios técnicos en los procedimientos electorales. El consejero delegado del Área de Gobierno de Economía y Participación Ciudadana, Miguel Ángel Villanueva, aseguró que se trata «de la mayor y más importante experiencia de participación ciudadana llevada a cabo en España hasta el momento». Además, señaló que esta prueba piloto, «refuerza la posición de Madrid como un importante núcleo de esta red de ciudades que ha apostado por favorecer el progreso gracias al uso de las nuevas tecnologías, y refirma su compromiso con la búsqueda de nuevos canales de participación». Los participantes podrán contestar a tres preguntas sobre las prioridades para mejorar el distrito, los equipamientos públicos más necesarios y las actividades que contribuirían más a revitalizar el centro, decidiendo así lo que es más importante para su distrito. Según Villanueva, la información que se obtenga será vinculante y el equipo de Gobierno tendrá muy en cuenta los resultados para definir las actuaciones a desarrollar en el distrito durante los próximos años. Necesidad de credencial Para participar es preciso obtener previamente una credencial que permite votar a través de cualquier ordenador con acceso a Internet o por teléfono móvil. Dicha credencial podrá obtenerse a través de Internet, si se dispone previamente de un certificado digital de la FNMT, o en alguno de los seis centros presenciales que se han habilitado en el distrito de forma específica para llevar a cabo este proceso de participación. Una vez se disponga de dicha credencial, el voto podrá ser emitido a través de Internet o de teléfono móvil, tanto en los propios centros presenciales, como desde cualquier otro sitio. En todo el proceso se garantizará el secreto del voto y la integridad de los resultados. Una vez cerrado el proceso de participación, el próximo miércoles a las 17,00 horas, los resultados podrán conocerse de forma prácticamente inmediata. Posteriormente se analizarán en un estudio sociológico junto a otros aspectos de esta experiencia. La iniciativa municipal ha satisfecho al PSOE, que es partidario, incluso, de utilizar la tecnología electrónica en las elecciones normales para evitar el abstencionismo. El secretario de Comunicación e Innovación de la Federación Socialista Madrileña (FSM), José Cepeda, aseguró que el desarrollo de la electrónica es una de las claves de las democracias modernas para consolidar y enriquecer el sistema. En su opinión, «evita la abstención y crea un método más participativo, dinámico y rico donde los ciudadanos se sienten implicados con la toma de decisiones políticas». La seguridad Según Cepeda, impulsar el voto electrónico utilizando distintos dispositivos tecnológicos permitiría a un ciudadano desde cualquier lugar del mundo hacer efectivo su voto en cuestión de segundos. «No tiene mucho sentido que un numero importante de la población haya sustituido el correo postal por el correo electrónico y aún hoy para votar en un proceso electoral cualesquiera tengamos que seguir dependiendo de un sobre y un sello. Hay que adaptarse a los tiempos», explicó. Para los socialistas, el problema existente para desarrollar plenamente el voto electrónico es aún la seguridad, aunque en este sentido, Cepeda precisó que es un inconveniente en vías de solución porque hay diferentes universidades españolas que han desarrollado e investigado diversos sistemas de fragmentación y encriptación de la información para que finalmente sean ensamblados en el momento final del escrutinio, con amplias garantías.