Sólo radicales independentistas y de ultraderecha apoyan el acoso al jefe del Estado

La Voz

ESPAÑA

07 oct 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

Si los ataques de radicales minoritarios a la Corona no son novedad, tampoco lo son los de sectores de ultraderecha que piden ahora la abdicación del Rey ante la «desmembración de España». Esta opinión, difundida desde la cadena Cope por el periodista Federico Jiménez Losantos, es rechazada incluso por quienes, como el PP, sostienen también que la unidad de España está en peligro. Sólo es respaldada por una minoría ultra y extraparlamentaria.

Esos mismos sectores pidieron la abdicación del Rey cuando en 1981 fue aprobada la ley del divorcio o cuando en 1985 se despenalizó el aborto. Como ahora, pedían al monarca que impidiese que las leyes salieran adelante. Pero, según todos los constitucionalistas, ni entonces ni en la actual reforma de los estatutos autonómicos puede intervenir el Rey, ya que se trata de leyes aprobadas por el Parlamento que el jefe del Estado se limita a refrendar de manera protocolaria.

Apoyo en los sondeos

Además de en el mayoritario apoyo político, en favor de la tesis de que los ataques son obra de grupos minoritarios juega la excelente acogida que el Rey tiene entre la sociedad y corroborada en los sondeos. En el último barómetro del CIS que preguntó por esta cuestión, la monarquía aparece como la tercera institución más valorada, sólo por debajo de la policía y el Ejército. Un sondeo de mayo del 2004 indica que el 81,2% de los españoles está de acuerdo en que «la monarquía está enraizada en la tradición y la historia española». Y en otro trabajo del CIS de 1998 un 70% juzga «fundamental» la labor del Rey «para el funcionamiento de la democracia en España».