Las protestas por el desalojo ayer de la Puerta del Sol se han desarrollado durante toda la noche. El movimiento 15-M ha convocado una nueva protesta para esta tarde.
03 ago 2011 . Actualizado a las 11:44 h.La Policía Municipal ha desalojado poco antes de las nueve de la mañana a la veintena de «Indignados» que han vuelto a acampar esta noche en la Plaza Mayor, después de la marcha que intentó ayer retomar la Puerta Sol.
Una treintena de agentes han obligado a los acampados a retirarse a la calle de Toledo, mientras los servicios de limpieza comenzaban a retirar los cartones, plásticos y mantas en los que han dormido sobre una rejilla del Metro. El desalojo se ha producido sin más incidentes que unos empujones y las protestas de los jóvenes, algunos de los cuales han sido identificados.
La Puerta del Sol y la Plaza Mayor permanecen bajo vigilancia de agentes de la Policía Nacional y Municipal. El Metro y el servicio de Cercanías se han restablecido en la estación de Sol a las 08.30. Fuentes del Ayuntamiento de Madrid han indicado que esta intervención se ha producido «en coordinación con la Delegación del Gobierno y en el marco del mismo dispositivo puesto en marcha ayer por la mañana» que permitió el desalojo del Paseo del Prado y la Puerta del Sol.
La veintena de jóvenes que ha pasado la noche en la Plaza Mayor había montado un pequeño puesto de información, construido con unos cartones, que pensaban mantener todo el día hasta la marcha que esta tarde a las 20.00 horas intentará regresar al kilómetro cero de Madrid. Uno de ellos, David, ha asegurado que cada vez que les echen de un sitio se irán a otro. «El movimiento no va a acabar porque la situación está peor y no hay motivo para abandonar. Seguirá en Internet, en las comisiones, en los barrios y en donde nos dejen», ha afirmado.
Fuerte dispositivo desde ayer
Un fuerte dispositivo policial cercó desde ayer por la tarde el centro de Madrid, aunque no pudo evitar la multitudinaria manifestación que se produjo hasta altas horas de la madrugada con paradas en la Plaza de Callao, Cibeles, el Congreso de los Diputados, Atocha y Sol. Al no poder entrar en esta plaza emblemática, los manifestantes decidieron trasladar la protesta a las calles al grito de «así, así, así lucha Madrid», «de norte a sur, de este a oeste, la lucha sigue, cueste lo que cueste», o «La policía está rodeada». Su número fue aumentando a lo largo del recorrido, al convocarse a los asistentes a través de Internet por la red social Twitter y desplazarse aquellos que estaban concentrados en las inmediaciones de Sol hasta la manifestación. La Gran Vía, la calle Alcalá, el Paseo del Prado y la Calle Atocha permanecieron parcialmente cortadas al tráfico, provocando algunos incidentes aislados ante el enfado de los conductores.
La marcha concluyó en Carretas, una de las calles aledañas a Sol, donde varios coches policiales antidisturbios y agentes impedían el paso a los manifestantes. Entre los asistentes se encontraba Eduardo Sanz Murillo, estudiante de periodismo de 21 años, quien ha confesado haber acudido a la manifestación al ver en Internet que estaban bloqueando el acceso a Sol. Otro estudiante, Andreu, opina que «la gente con esta marcha ha demostrado que no necesita una plaza para protestar» y que «si la policía pretendía acallar la protesta, les ha salido mal». Junto a él, Quimi Nájera, de 21 años y cantante de profesión, cree que el hecho de que «a priori no haya habido respuestas por parte de los políticos» ha llevado a que la ciudadanía «muestre su indignación en la calle».