El juez concluye que Camps pagó todos sus trajes al sastre

Gonzalo Bareño Canosa
gonzalo bareño MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

El PSOE dice que recurrirá la sentencia absolutoria, para lo que dispone de 5 días

31 ene 2012 . Actualizado a las 06:00 h.

El magistrado Juan Climent, que presidió el juicio del caso de los trajes por el supuesto delito de cohecho del expresidente valenciano Francisco Camps, dictó ayer su sentencia tras el veredicto de no culpabilidad emitido por el jurado popular. El fallo supone una desautorización en toda regla al sastre José Tomás, uno de los principales testigos en contra de Camps durante el proceso. Lejos de creer su versión de que el expresidente de la Generalitat no pagó nunca las prendas que le encargó en la tienda en la que él trabajaba, el juez Climent afirma que «todas las prendas adquiridas fueron abonadas por el acusado Francisco Enrique Camps Ortiz personalmente al señor Tomás».

La sentencia hace suyos los argumentos esgrimidos por los miembros del jurado popular, que consideraron que el exjefe del Ejecutivo valenciano encargó cuatro trajes en la tienda Milano y, tras comprobar que no se ajustaban a sus medidas, los devolvió. Posteriormente, según el tribunal popular, compró en la tienda Forever Young, a la que se había trasladado José Tomas, tres trajes y un par de zapatos en el año 2007, y un traje y una americana en el 2008.

Estas últimas ropas son las que, según el juez y el jurado, ha quedado probado que Camps pagó al sastre. De ahí concluye el magistrado que «el acusado no es culpable de haber recibido regalos consistentes en prendas de vestir de forma continuada en consideración a su función de presidente de la Generalitat».

A la espera de la Fiscalía

La sentencia da un plazo de cinco días a la Fiscalía y al PSOE valenciano para presentar un recurso ante el Supremo, y los socialistas ya han anunciado que lo harán. El ministerio público no tomó aún una decisión sobre si recurrirá o no la sentencia, cuya difusión ha coincidido con la toma de posesión del nuevo fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce. En todo caso, para que prosperase cualquier recurso a la resolución adoptada por el jurado sería necesario que se reconociera que el tribunal popular ha cometido errores que resulten evidentes, algo que parece descartado tras la sentencia dictada por el juez Climent. Tras conocerse ayer su contenido, el sastre José Tomás afirmó que constituye «un insulto a la inteligencia».