Plantea que las primarias se celebren entre las europeas del 2014 y las autonómicas del 2015, pero los críticos le pedirán adelantarlas al 2013
15 dic 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Alfredo Pérez Rubalcaba sigue vivo al frente del PSOE después de cosechar la mayor derrota histórica del partido en unas elecciones generales y de tres descalabros autonómicos consecutivos, en Galicia, País Vasco y Cataluña. Ese, el de aguantar el chaparrón y evitar que una rebelión interna lo forzara a abandonar de forma precipitada la secretaría general, era su primer objetivo antes de emprender una nueva etapa de oposición que le permita llegar al 2015 con posibilidades de ser candidato. Pero ese camino no será sencillo. El líder del PSOE tendrá oportunidad de comprobar hoy, durante al reunión en Madrid del consejo territorial de los socialistas, que no todos comparten su hoja de ruta.
La dirección del PSOE pretende trasladar a los secretarios territoriales la conveniencia de que las primarias para elegir al candidato se celebren entre las elecciones europeas del 2014 y las autonómicas del 2015. Eso daría a Rubalcaba un margen de dos años sin tensiones internas que neutralizaría los movimientos que pretenden articular una alternativa a su liderazgo. La principal opositora al secretario general es la catalana Carme Chacón, pero en los últimos días otros dirigentes como el ex director general de la Guardia Civil Joan Mesquida se han mostrado dispuestos a encabezar el relevo.
Sin plantear un conflicto abierto, varios secretarios generales parecen dispuestos a secundar hoy la tesis del madrileño Tomás Gómez de que las primarias deben celebrarse cuanto antes para que el PSOE tenga un candidato asentado y que un posible adelanto de las elecciones por parte de Mariano Rajoy no coja al partido desprevenido y obligue a renunciar a las primarias. Eso es exactamente lo que sucedió en Galicia. Algo que benefició al líder del PSdeG, Pachi Vázquez. Aunque diversas fuentes sitúan a Vázquez junto al valenciano Ximo Puig y el navarro Roberto Jiménez entre quienes reclamarán hoy las primarias cuanto antes, fuentes del PSdeG no confirmaron ayer este extremo a La Voz de Galicia. Lo que sí aclararon es que el líder del PSdeG esperará a que el panorama se despeje en Madrid antes de abordar el calendario del congreso gallego.
Vuelco en Andalucía
Además de estos barones regionales, otras voces relevantes en el PSOE como la del ex ministro de Justicia Francisco Caamaño, el ex alcalde de San Sebastián Odón Elorza o el regidor de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, han apostado claramente por adelantar las primarias y proceder al relevo. Rubalcaba ha apaciguado sin embargo otro frente, quizá más peligroso para él, como era el del andaluz José Antonio Griñán, que hasta hace poco reclamaba que se dieran pasos para la sustitución y hasta amenazaba con disputarle el liderazgo. Ahora, Griñán considera que abrir en el 2013 un proceso de primarias sería prematuro. En ese cambio de opinión influye su consolidación en Andalucía. Tal y como refleja la encuesta del Instituto de Estudios Sociales Avanzados hecha pública ayer, el PSOE andaluz ha dado un vuelco a la situación y aventaja ya en 8,5 puntos al PP, que hace solo nueve meses ganó allí las elecciones con el 40,6 % de los votos frente al 39,3 % del PSOE. Los socialistas obtendrían hoy el 39,2% y el PP, el 30,7 %. En esa situación, a Griñán no le conviene desestabilizar el PSOE y por eso firma un tregua tácita con Rubalcaba.
Al margen de si deben ser antes o después, la previsión de Rubalcaba de celebrar las primarias poco antes de las autonómicas del 2015 choca con el hecho de que en esa época se deben celebrar también las primarias para elegir a los candidatos en las comunidades, lo que contaminaría ambos procesos. Además, obligaría a elegir entre aspirar a la secretaría general nacional o ser candidato regional, con lo que quien se arriesgara a retar a Pérez Rubalcaba en Madrid y perdiera quedaría definitivamente descolgado.