La cúpula del PP, ante el juez por el caso Bárcenas

Enrique Clemente Navarro
Enrique Clemente MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

Ruz interroga hoy a Cascos y Arenas, y mañana a De Cospedal, para que expliquen la financiación del partido y los supuestos pagos en B

13 ago 2013 . Actualizado a las 11:52 h.

El caso Bárcenas no da tregua ni en pleno agosto. La publicación el pasado domingo de la nómina de mayo del 2012 del ex tesorero puso en cuestión la versión que había dado Mariano Rajoy en sede parlamentaria solo diez días antes, ya que demuestra que seguía a sueldo del PP, a pesar de que, según dijo el presidente, «ya no estaba en el partido». Toda la oposición asegura que mintió, lo que augura que aumentará la presión cuando este regrese de sus vacaciones en Galicia.

Este nuevo revés político para el presidente del Gobierno llegaba poco antes de que el juez Pablo Ruz interrogue hoy a los ex secretarios generales del PP Francisco Álvarez-Cascos y Javier Arenas y mañana a la actual, María Dolores de Cospedal, para que den explicaciones sobre la supuesta financiación irregular del PP. Acudirán a la Audiencia Nacional cuando ya el juez y la Fiscalía Anticorrupción consideran acreditada la doble contabilidad del partido con la existencia de una caja B. Así lo admitió Bárcenas el 15 de julio en su declaración judicial, cuando dio un giro total a su estrategia. También reveló el pago a los altos dirigentes populares, incluido Rajoy, de cantidades en negro y sobresueldos, abonados en concepto de gastos de representación para completar sus retribuciones como diputados o senadores, eludiendo así el régimen de incompatibilidades de las cámaras.

Tres de los supuestos receptores de esas cantidades y jefes de Bárcenas durante los veinte años que este controló las cuentas del PP, como gerente y tesorero, comparecerán en calidad de testigos, es decir sin abogado y con el deber de decir la verdad. Según los apuntes del ex tesorero, Cascos actuaba como recaudador del partido ingresando en metálico el dinero que recibía de empresarios anónimos. El actual presidente de Foro Asturias también habría recibido cuantiosos sobresueldos (casi 600.000 euros) y pagos en dinero negro (412.000). Arenas habría percibido 1,1 millones de euros del partido en 20 años y 234.320 más en negro.

El juez está obligado a circunscribir su investigación a los delitos fiscales que se hayan podido cometer a partir del 2007 y a los cometidos contra la administración pública, como cohecho y malversación de caudales, desde el 2002 en adelante, ya que los anteriores han prescrito. Pero consideró importante llamar a declarar a Cascos y Arenas porque cree que pueden aportar datos relevantes sobre el funcionamiento de la financiación del PP desde 1990 a la actualidad.

El comprometedor recibí

Pero la declaración más esperada es la de la actual secretaria general, que ha negado tajantemente la existencia de la contabilidad B y el cobro de dinero en negro que Bárcenas le atribuye (60.000 euros entre el 2008 y el 2010). Su declaración es importante porque los hechos investigados por el juez y por tanto no prescritos caen de lleno en su período como secretaria general, cargo que ocupa desde el 2008. Pero, además, deberá aclarar un asunto que la atañe directamente. En su declaración ante el juez, Bárcenas aseguró que recibió una comisión ilegal de 200.000 euros por parte de la constructora Sacyr a cambio del contrato de basuras del ayuntamiento de Toledo y que entregó esa cantidad al gerente del PP en Castilla-La Mancha, José Ángel Cañas. Este último firmó un recibí, que el ex tesorero entregó en la Audiencia Nacional. Según Bárcenas, De Cospedal estaba al corriente de esta operación destinada a financiar su campaña. El supuesto cohecho no habría prescrito, ya que fue en el 2007.

Antes de las comparecencias de Arenas y Cascos, declararán el cajero del PP Antonio Ortíz y Cristóbal Páez, que sustituyó como gerente a Bárcenas, y al que, según declaró el extesorero el 15 de julio, cuando en julio de 2009 anunció que dejaba temporalmente su cargo cedió una carpeta donde se encontraban todos los datos de la contabilidad B y los sobresueldos, y que tras cuatro meses recuperó.