Un Gobierno de leales a Rajoy mermado por la crisis económica

G. Bareño / E. Clemente MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

El presidente aplaza los cambios pese al duro desgaste en varias carteras

20 nov 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Hubo una época en la que Mariano Rajoy consideró seriamente el llenarde independientes su Consejo de Ministros. «Pondré a los mejores en cada campo, sean o no del partido», decía entonces a quien quisiera escucharle. Pero el huracán de los mercados que se llevó por delante los gobiernos del griego Papandreu y el italiano Berlusconi para sentar en sus sillas a dos tecnócratas como Papademos y Monti, le hizo olvidar la idea y blindarse con un gabinete muy político. Por encima de todo, para asumir una cartera pesó la confianza y la cercanía con Rajoy.

Sobre el papel, se trataba de un Gobierno sólido, experimentado y volcado en lo económico, pero con la batuta en manos de una joven pero mandona y competente política como Soraya Sáenz de Santamaría. Comenzó el Ejecutivo con aspiraciones de una regeneración que trascendiera lo meramente económico, pero la fuerza de los hechos y la necesidad de recortar en todo ha obligado a rebajar las expectativas.

Como si intuyera que no habría más política que hacer frente a la crisis, y temeroso de quedar en un segundo plano, Rajoy renunció a nombrar a un vicepresidente económico. Asumió el mando y dio paso a una arriesgada bicefalia entre Montoro y De Guindos. Pronto se vio que ese esquema generaba unas tensiones que todavía continúan y que podrían provocar la primera crisis de Gobierno, ahora que ha pasado el ecuador.

El desgaste de algunos ministros como Montoro o Báñez es brutal por las subidas de impuestos y la reforma laboral. Otros, sin embargo, se han quemado por su exceso de ambición y escasa cintura, como Wert y Ruiz Gallardón, o por su falta de empuje, como Mato o Fernández Díaz. Brillan en el Gobierno la gestión de la eficaz Ana Pastor y del popular Arias Cañete. Y, por encima de todos, Sáenz de Santamaría, convertida en mujer orquesta. Con sus luces y sus sombras, Rajoy los protege a todos y se resiste a introducir unos cambios que se antojan ya necesarios.

José Manuel García-Margallo. Asuntos Exteriores

Poco diplomático, firme

Se ha enfrentado a crisis como la nacionalización de YPF por Argentina, Gibraltar y el espionaje de EE.UU. Poco diplomático, firme, sobreactuado a veces, su objetivo ha sido hacer de España un país previsible.

Cristóbal Montoro. Hacienda y Administraciones Públicas

Triunfalista

Ha asumido la difícil tarea de ajustar las cuentas públicas, en lo que ha tenido un éxito relativo. Blanco de críticas por la subida de los impuestos, lo contrario de lo que predicaba. Le pierde su triunfalismo.

Alberto Ruiz Gallardón. Justicia

Conflictivo

Se ha metido en todos los charcos y tiene en contra a jueces y ciudadanos por la subida de tasas judiciales. Creó problemas a Rajoy con una errática y polémica propuesta de reforma del aborto.

Miguel Arias Cañete. Agricultura y Medio Ambiente

Gestión solvente

Es el ministro mejor valorado por una gestión solvente propia de un experto en su campo, trufada con declaraciones pintorescas como que come yogures caducados o se baña con agua fría.

Pedro Morenés. Defensa

Difíciles papeletas

Ha tenido que lidiar con asuntos muy complicados como el déficit de tarifa eléctrica, la nacionalización de YPF o la retirada de las ayudas a los astilleros con resultados desiguales.

Pedro Morenés. Defensa

El ministro invisible

Se le podría calificar como el ministro invisible por su poco protagonismo mediático, lo que contrasta con antecesores como Bono o Chacón. Es también el de menor perfil político del gabinete.

Luis De Guindos. Economía y Competitividad

Bajo perfil político

La reforma del sistema financiero ha sido su gran apuesta, no culminada. Pese a ser el más partidario de recortar el Estado del bienestar, tiene mejor imagen que Montoro por su bajo perfil político.

Ana Pastor. Fomento

Gestión de la escasez

Una de las mejor valoradas. Ha hecho valer su prudencia y capacidad de gestión sin buscarse enemigos pese a lidiar con un ministerio muy complicado por la falta de presupuesto para invertir.

Jorge Fernández Díaz. Interior

Apuesta fallida

Una apuesta arriesgada de Rajoy, por ahora fallida. Declaraciones polémicas, excesos policiales y mala gestión del caso Bolinaga y la doctrina Parot juegan en su contra frente al electorado del PP.

Fátima Báñez. Empleo y Seguridad Social

Sin resultados

Le tocó bailar con la más fea. La reforma laboral la hizo impopular y la falta de resultados en la lucha contra el paro todavía más. En su haber figuran sin embargo las medidas contra el fraude laboral.

José Ignacio Wert. Educación, Cultura y Deporte

El peor valorado

Es el ministro peor valorado, desautorizado por el Gobierno, criticado por el PP y con buena parte del mundo de la educación y la cultura en contra. Rajoy lo sostiene en el cargo personalmente.

Ana Mato. Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad

Quemada por Gürtel

Rajoy decidió premiar su lealtad con un ministerio. Pero Mato está políticamente quemada por sus relaciones con la trama Gürtel. El copago farmacéutico acabó de hundir su popularidad.