El BNG tuvo presente en su acto central del Día da Patria el primer aniversario del siniestro del Alvia. Xavier Vence trasladó «os mellores sentimentos deste gran corazón colectivo» a las víctimas y sus familias, los vecinos de Angrois, los bomberos y el resto de profesionales y voluntarios. «Son demostración viva da dignidade deste pobo». Frente a ese ejemplo, denunció que «PP e PSOE tratan de tapar as responsabilidades políticas con medallas, e tratan de encubrir a chapuza tecnolóxica das empresas implicadas». Aseguró que el Bloque seguirá reclamando «a verdade, unha comisión de investigación e que se implanten dunha vez as medidas de seguranza» en el ferrocarril.
Niños «ao borde da fame»
Vence se mostró muy crítico con el cálculo de la Xunta de que 18.000 familias con niños «viven ao borde da fame literal». Arguyó que «claro que da vergoña abrir comedores escolares no verán, pero tampouco abonda con remendos de caridade». Sostuvo que «non abonda con esmolas» y que hay que revisar «estas políticas que están disparando a pobreza». Vence proclamó que «Galicia está no límite, pero non está rendida», y que «os nacionalistas seguimos en pé» ante una estrategia recentralizadora del Estado en la que censuró «a complicidade de todo o provincianismo papanatas que temos en San Caetano». Como ejemplo de esas políticas lesivas refirió el cómputo de la balanza fiscal gallega por el Gobierno, que tildó de «estafa intelectual».
El BNG estuvo arropado por representantes de decenas de organizaciones independentistas de toda Europa.